🍁Lena
Me agacho y comienzo a recoger los cristales que cubrían el cuadro. «¿Quién le pone vidrio a un cuadro tan caro? ¿Y que hace aquí en medio de un pasillo?».
—Ay, me van a matar, mi papá tardó años haciéndolo —se lamenta y me asombro.
—¿Tu papá lo hizo?
—Sí o sea, le puso el cristal para ocultar... —detiene sus palabras y rebusca en el suelo. Levanta el lienzo y recoge la pequeña llave.
—Uy, seguro abre una puerta secreta —bromea Hair y Tani lo fulmina con la mirada desde el piso.
—Ayúdenme a recoger este desastre y les digo para que es la dichosa llave —nos orienta y accedimos.
—Yo ya sé para qué es —susurra Hair y me volteo a verle. Una estúpida sonrisa adorna su cara y caigo en cuenta de que me he perdido de algo.
Sin hacer mucho ruido limpiamos el desastre y Tani guarda lo que queda de la obra de arte en la habitación de su madre. Nos guía por numerosos pasillos hasta llegar a una puerta situada en línea recta y seguimos sus pasos. Hairam me pellizca el trasero varias veces y le lanzo zorras por la cara. En realidad me gusta pero no pienso ponérsela tan fácil.
Tani abre la puerta y nos recibe una habitación. Nos adentramos y hago una mueca porque no entiendo el misterio de la situación, pues se trata de un cuarto común, supongo que es para huéspedes... No entiendo nada.
—¿Escondieron la llave en un cuadro para ocultar esto? Que alguien me explique porque no distingo la sorpresa del asunto —digo paseándome por los alrededores.
—¿Lena podrías abrir esa puertecita, por favor? —me pide Tani apuntando tras de mí. Me volteo y no veo nada, solo pared.
—¿Dónde?
—Da un par de toques en esa parte —señala Hair luego de que Tani le susurre algo al oído y hago lo que me dice—, se siente hueco porque eso no es una pared, es una puerta. Esa pequeña ranura que ves ahí es para adentrar la llave —me explica y suelto un: Aaaah, que guay.
Inserto la llave en la ranura y le doy una vuelta a la derecha. Estoy al punto de abrir cuando algo me hace voltearme...
—Hair, ¿Y tú cómo sabes que ahí hay una...? —me interrumpe, termina de abrir la puerta y me empuja dentro de la próxima habitación—. ¡Ayyyy! ¿Qué haces?
Entra conmigo y la cierta tras él.
—¡Diviértanse! —grita Calletana del otro lado y escucho sus pasos cuando se aleja.
Me quedo en silencio mientras recorro la habitación con la vista. Está forrada con terciopelo y alfombras violetas. Hay una cama gigante y varios sillones. Todo el inmueble parece cómodo y no hay nada más, solo asientos esponjosos.
—Dice Calletana que esta habitación fue un regalo de aniversario de su padre para su madre. Es un poco más privado y cuando tocan esto... —apunta a un botón en la pared y lo toca. Entonces se enciende una música suave—. Afuera no se escucha nada.
—No estoy entendiendo nada, pero toda esta situación me pone... —admito encantada con mi alrededor.
«¿Qué estará tramando este loquillo?».
—¿Te sorprende que un Nerd como yo te halla preparado una cita como esta? —me pregunta caminando amenazante hacia mi—, bueno, no he planeado nada, pero esto ha salido demasiado bien, voy a atribuirme los honores.
Retrocedo unos pasos para chocar inocentemente con el borde de la cama y caer hacia atrás «Repito, de forma ilusa».
—Me sorprende que a estas alturas seas un completo extraño, porque ahora mismo no te conozco —pronuncio con la mirada en alto.
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Hairam. ¡Quiero tu virginidad! 🧋 PRÓXIMAMENTE EN FÍSICO 📖
RomanceNo pudo evitar mostrarle el mundo real; no se detuvo cuando sus labios rozaron los de él, y tampoco lo pensó dos veces en hacerle la mejor propuesta de su vida. Su madre le dijo que no era sano obsesionarse; como tampoco lo era romper una amistad po...