Hairam. ¡Quiero tu virginidad! 🧋 PRÓXIMAMENTE EN FÍSICO 📖

Capítulo 27 "Hay que repetir"

🍁Lena
El mejor cumpleaños de mi vida a penas ha comenzado y ya estoy temiendo porque acabe.

He recibido un enorme pastel, cortesía del Hotel, y un hermoso bolso con una playera, una gorra y una mochila con el logo de la cadena Hotelera Marriott. Todo de los colores blanco y azul.

Mamá me ha obsequiado una hermosa pulsera de plata con numerosos dijes de diferentes formas; Connor y Calletana me regalaron dos entradas para el juego de fútbol en Barcelona que se realizará el mes próximo donde jugarán Manchester y Real Madrid, obviamente para que fuese con Hairam; los padres de Connor y Annia me han dado una línea completa de acondicionador y crema capilar de coco junto con accesorios para mi cabello que adoré; Harvey y Carmen me sorprendieron con un vestido justo como me gustan a mí, es color azul marino y se ajusta a mi cuerpo a simple vista, apuesto a que me queda de muerte; y por último, mi mejor amigo/novio ¡Ay ya ni sé cómo llamarnos! Me dejó claro que su sorpresa aún no había acabado.

Agradezco a todos por los detalles tan maravillosos que me obsequiaron y demuestro mi felicidad con lágrimas de alegría e ilusión.

«¿Cómo expresar mi actual estado de ánimo?». Pues ni yo misma sé explicarlo.

—¡Gracias a todos de verdad! No tenían porqué molestarse —les digo lloriqueando y Hairam me apega a su cuerpo y besa mi frente.

—Te mereces eso y mucho más mi niña —dice mi madre con orgullo.

—Y pues otro motivo más de celebración, somos oficialmente parientes, Laura —le comunica Harvey a mi madre y me volteo para ver su reacción.

Mamá frunce el entrecejo y rodea a todos con la vista. Los demás se echan a reír y nos miran a mí y a Hair con complicidad.

—¿De qué me he perdido?

—No de mucho, suegra —le contesta Hairam y mi madre suelta una risita sin comprender. Seguidamente todos permanecemos en silencio esperando a que finalmente entienda la situación y ¡Pum! Ha caído.

—¡Ahhhhhhhhhhhh! —grita con las manos elevadas al cielo—. ¡Ususuuu! ¡Estoy que flipo de alegría! ¡Al fin Diosito, escuchaste mis súplicas! —exclama a las alturas y corre hacia nosotros. Nos abraza y me dice al oído: —Te dije que mi nieto tendría los ojos verdes ¿Ya lo ves? Tu mami no se equivoca, querida —susurra y me besa en la cien.

—Estamos muy felices por ustedes, ya era hora ¿no? —comenta Carmen y todos coinciden.

—Aclaro para ustedes dos —le dice Hair a nuestros dos amigos y ellos corresponden atentos—. No más besos de cinco, al menos no con Lena.

—¿Eh? —nuestros padres murmuran no haber entendido y Calletana carraspea con la garganta avergonzada. Connor se echa a reír y nos hace un gesto para irnos antes de que las fieras entiendan la indirecta de mi novio. Por lo que le hacemos caso y nos lleva la urraca cuando nos lanzamos a correr.

«¡Jaaaaa! ¿Cómo me veo ah? Digo, con mi novio/amigo/nerd de la mano, ya saben, estilo: El Unicornio nerd es mío, solo para que no lo miren, no le hablen, no respiren cerca suyo, otzeaaaa, no nada. ¿Okay?».

Camino agarrada de su mano como si llevara conmigo un Grammy y no una persona. Y es que me siento extremadamente orgullosa y feliz de ir por todos lados representada con semejante bombón divino.

«¡Gracias San Unicornio de los deseados! No te conozco pero te rezo».

* * *

—Todavía me duele la cabeza por la resaca de anoche —musito observándolo con hambre pero con asco.

—Yo no te mandé a que bebieras tanto —me regaña e insiste. Me agarra la cara y la acerca a la punta rosada.