Capitulo 33

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GUILLERMO

La verdad no sé qué hacer en este momento, si suicidarme o buscar un tutorial de cómo hacer arroz , la primera opción es buena tan bien , pero creo que voy por la segunda .

—Tío , tengo hambre — miro a Amira que está apunto de sufrir un colapso mental porque no encuentra el cuchillo que le regaló Ian .

—Yo también — le digo , ella se ríe mientras me saca  el dedo medio.

Realmente no sé que hacer , la última vez que intente cocinar , casi incendio el departamento y eso que lo hice con mucho cuidado .

—Y si llamamos a mi mamá ? — niego ante su petición , Dalia ahora debe estar entre los brazos de Morfeo , al igual que Ian , seguramente hicieron el duro contra el muro .

—Creo que ví en el refrigerador un empaque de frutas — avanzó hacia el refrigerador y ahí está mi salvación antes de que me de un paro cardíaco .

Saco los dos empaques de comida y Amira suelta un suspiro de alivio.

—Al fin algo de comer — decimos al mismo tiempo , pongo en el microondas mi comida y el de mi sobrina , en un bol .

Leo la nota que estaba en el empaque .

Mejor amigo de mi dulce riñón , no quemes la casa , por favor , en el primer empaque hice tu desayuno favorito , solo lo calientas en el microondas y del fuego andante , solo lo pones en un bol y ya , disculpa si no estamos desayunando con ustedes, tuvimos una madrugada única .

Posdata : No olvides llevarte tu comida a tu consultorio :)

De : Ian y Dalia , las personas que más quieres .

Guardo la nota y pongo mi comida en un tupper y la otra mitad para desayunar con mi sobrina, me sirvo un té y me siento frente a Amira .

—Cuál te gusta más ? — miro lo que me enseña y son dos tulipanes de color blanco y negro .

Me recuerdan a dos personas , esos dos tulipanes .

—Los dos .

Ella asiente y los pone en el florero de la entrada , se sienta otra vez y empieza a comer sus frutas .

—Y tu amigo ? — le pregunto — Cómo se llamaba ? Ya me olvidé su nombre — ella ríe .

—Derek — responde mientras toma su bebida .

—Si , Derek — me levanto de la silla y me dirijo a lavar mi plato y el de Amira — Me cae bien .

—Si claro — dice sarcásticamente .

—Y hasta quiso conocer a San Pedro —ella suelta una risa por lo último que digo , hubiese sido divertido que conosca a San Pedro .

—Pobrecito — dice ella mientras se dirige a su mochila.

—Nah .

Tomo las cosas que tengo llevar al consultorio , Amira se despide de Ito y salimos de la casa .

Le abro la puerta trasera y ella empieza a rebuscar el auto , creo que debo comprar otro auto , este ya no me gusta .

—No vas a encontrar nada — ella suelta un suspiro de alivio y se acomoda bien en el asiento , Amira se pone a jugar con el cuchillo que le regale mientras mira por la ventana cuando pongo en marcha hacia su colegio .

Cien motivos para Amarte. (LIBRO 1, RESUBIENDO) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora