Save my childhood

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Descripción explícita.

Mención de sangre y uso no consentido de fármacos.

— Buen día Mason. — Reconoció el profundo acento poniéndose rígido al instante.

El empático observó como trataba de formular palabras pero ninguna salió. — No te molestes en contestar, Hannibal sabe que no puedes, no se ofenderá.

— Puedes intentar recitar la octava musical o moverte como una larva pero el fármaco al que te hemos expuesto estos días ha afectado, principalmente, tu función motriz oral, también careces de fuerza y coordinación. La parte positiva de esto es que tus sentidos estarán más alerta que nunca, la sobreestimulación hará que el dolor sea más agudo, ya lo experimentarás.

No había notado su desnudez inferior hasta que un fuerte pellizco en una pierna lo hizo jadear, Will sostenía lo que parecían pinzas para cableado y un bote transparente sin etiqueta con algo amarillento, cuando vertió un poco sobre la herida notó que era lejía.

— Después de un tiempo considerable investigando descubrimos que tienes problemas con la regulación hormonal de la espermatogénesis, no vas a necesitar estos si consideras que podrías ser estéril. — El doctor apretó sin consideración los testículos del hombre en la plancha, trató de gritar pero solo salían gemidos rotos de su garganta.

— No te preocupes Mason, Hannibal es un cirujano excelente. Sabe donde cortar para hacerte sufrir más sin alcanzar la muerte tan rápido.

El rubio abrió los ojos con terror, vio como el mayor tomaba un bisturí de una charola con varias herramientas quirúrgicas y lo acercaba a su entrepierna. Trató de levantar la cabeza pero no pudo seguir cuando el dolor llegó a la par de un fuerte mareo.

Lecter sabía que el no haberle colocado ni siquiera anestesia local lo derribaría, pero siempre podía dar más, por eso buscó potenciar sus sentidos y consciente maltrató la herida para que lo sintiera como el infierno.

Se tomó un momento para terminar el primer corte y ver la sangre escurrir en la parte superior del escroto, una incisión horizontal completa le permitió el acceso a los conductos deferentes y los testículos. De la mano de Will tomó una jeringa con alcohol etílico (una alternativa a la lejía para no tener complicaciones innecesarias) y sin ceremonias empezó a insertarla dejando pequeñas cantidades de la sustancia en cada montículo, llenándolos de agujeros.

Mason lloriqueaba buscando fuerzas para alejarse de la quemadura interna y el dolor que se extendía por todo su cuerpo, solo terminó contribuyendo al aumento de su sufrimiento con la frustración que florecía en cada espasmo sin respuesta.

Hannibal cortó los conductos deferentes liberando los órganos del resto, listos para ser extraídos, continuó la incisión hasta la parte inferior pasando por el perineo donde una sacudida desafortunada provocó que el bisturí se enterrara unos cuantos centímetros en la piel llena de terminaciones nerviosas.

Cuando el rubio creyó que su tortura estaba por ser aplacada vio el cautín, se dio cuenta de que sus heridas no serían cerradas con aguja e hilo (como era común) sino soldadas con el artefacto. La alta temperatura no hizo nada para adormecer la zona, solo potenció el dolor provocando que sus cuerdas vocales se forzaran por el grito devastado que floreció.

Un mareo lo atravesó cuando el olor a sangre y piel quemada llegó a sus fosas nasales, sintió que el techo caía sobre él así que se giró justo cuando Will sostuvo los testículos recién extraídos frente a su cara, las náuseas aumentaron.

— Al parecer los bebés Verger tendrán huevos para el almuerzo ¿No te alegra Mason? Alimentarás a tus hijos con cada parte de tu cuerpo, que padre tan dedicado, Molson estaría orgulloso de ti, hijo de puta.