Eyén
No puedo creer que este pasando ¿Alex es el sobrino de Alicia?.. pero si no se parecen en nada o eso creo yo.
-¡Hola chicas! Pasad...bienvenidas, ¿ como estais?
Iba a contestar cuando una voz me interrumpe.
-Tita, te la presento, ella es pijita -comienza a reírse al ver mi cara de querer matarlo.
-Veo que ya se conocen -comenta Alicia
-Si hija, por mala suerte -contesto apenada.
-Bueno, vamos para el jardín que está todo ya preparado.
Entramos a la casa quedándome impresionada con ella ¡es preciosa! tiene un estilo moderno como la nuestra. Llegamos al precioso jardín con una enorme piscina tapada con un vidrio de cristal ¡simplemente hermoso!
Voy a sentarme cuando siento el golpe de una pelota de tenis en mi cara y una voz pequeñita que hace que me gire.
-Perdón señorita, no tengo buena puntería.
-Ya lo veo -digo mientras nos reímos -¿como te llamas?
-Soy Emily y tu serás Eyén.
-No tendrás buena puntería pero lista si eres -digo entre una gran sonrisa que se me quita al escuchar otra voz detrás mía.
-Pues yo creo que tienes buena puntería -comenta el imbécil riéndose y le tiro una mirada.
Mientras cenamos, Alicia me pregunta cosas de mí, que quiero estudiar, a que universidad quiero ir ... Alex estaba sentado justo delante mía y evito su mirada toda la cena ¿se habrá olvidado delo que pasó? Eso espero.
Vamos por el postre, siento a Alex mirándome y el ambiente está incomodo, Emily empieza a contarme sobre sus muñecas y empiezo a jugar con ella. Después de un rato, siento unas ganas inmensa de ir al baño y más con esta situación incomoda, mi madre y Alicia mientras hablaba sobre ropa y lugares tuve que cortarles la conversación.
-Perdón Alicia, ¿podrías decirme donde está el baño? -pregunto un poco incomoda.
-Claro pequeña, Alex acompáñala al baño – añade Alicia haciendo que mi tensión subiera a mil.
¡¿como?! Veo a Alex levantarse y lo sigo mientras mis piernas tiemblan con cada paso que daba. Subimos las escaleras y me señala el baño.
-Ahí está el baño
-Vale gracias -digo con nerviosismo mientras entro al baño, que incomodo a sido por dios!
Después de hacer mis necesidades, salgo del baño y veo que no está ¡menos mal! voy andando hacia las escaleras cuando siento unas manos tapándome la boca y llevándome a una habitación.
-Ahora me vas a contar todo lo que pasó -me ordena Alex mirándome fijamente a mis ojos.
-Porqué te lo tendría que contar, es mi problema.
-Porque no entiendo lo que dijo el hombre sobre tu padre.
-Padrastro y no te lo voy a contar -contesto mientras me dirijo hacia la puerta de la habitación pero Alex cierra la puerta y me atrapa con sus brazos.
-Me lo vas a contar ahora porque tienes un problema muy gordo y veo que tu madre no sabe nada
Mi corazón empieza a acelerarse cuando noto la respiración de Alex sobre mi oído, se lo voy a tener que contar para que me deje tranquila.
-Alex, es algo muy... feo -expreso con un nudo en la garganta.
-Toma tu tiempo -dice sentándose sobre su cama esperando que empezase a hablar.
Después de contarle toda mi historia, noto como caen lagrimas de mis ojos, Alex levanta su mano y me quita la lagrima.
-¡Que hijo de puta! Lo mataría si lo tuviese delante -comenta mientras se levanta de la cama.
-¿No te han dicho que eres muy bruto? -pregunto en forma sarcástica.
-Mira pija, esos temas me ponen así, no me eches la culpa.
-Vale, ya te lo he contado ¿puedes abrir la puerta? Gracias.
Alex abre la puerta y salgo de la habitación disparada para el jardín, Alex viene detrás mía con una chaqueta en su mano.
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El mar con nosotros imbécil (disponible libro físico en Amazon)
RomanceTras un pasado trágico, Eyén se muda junto a su madre a Cádaques, donde conocerá a su grupo y al chico misterioso ¿Alex? Pero todo no es de color rosa, muchos problemas se avecinan en su vida.