Ascenso De La Faccion De La Mafia

Capitulo 4: Nos Vemos

Tsuna se encontraba intentando qué la chica desconocida se pusiera de pie.

-Gracias por ayudarme, en verdad lo siento, desde que era niña me pasaba esto- dijo la monja con cara adolorida hablando en otro idioma, por suerte Tsuna podía identificar bien el lenguaje que hablaba la rubia, era Italiano, por lo que pudo responderle con fluidez

-Debes tener cuidado- dijo Tsuna

-¿Eeeh? Señor ¿Usted habla mi idioma?- dijo sorprendida la monja

-Este, si- comento el Vongola algo incómodo debido al recordar el duro aprendizaje que recibió de Reborn sobre el tema para que pudiera hablar con fluidez, ya que ha palabras de Reborn:

"Seria una vergüenza para los Vongola que su líder no sepa hablar Italiano"

Tsuna en su tiempo le encontró lógica a las palabras de su tutor, solo que a día de hoy no entendía que tenía que ver hablar Italiano con estar encerrado en una jaula con serpientes.

-Bueno, nos vemos- Tsuna se había dado ya media vuelta intentando acabar con la conversación cuando aquella chica le tomo de su manga

-Este... señor, en realidad si no es mucha molestia ¿Podría ayudarme? Soy nueva en esta ciudad y estoy buscando la iglesia católica de la ciudad, y la verdad no puedo entender mucho de lo que se dice- dijo la chica con nerviosismo

-Ya veo, pero lo siento no ser de mucha ayuda, también soy algo nuevo en el lugar y no se si de verdad existe una iglesia católica por aqui, enserio lo siento- respondió el Vongola

-No, yo siento mucho que se tenga que disculpar- dijo la chica apenada

Tsuna al empezar a darse cuenta que esto se estaba volviendo en un bucle infinito de disculpas, intento cambiar la conversación

-¿Cual es tu nombre?- pregunto el Décimo

-¿De verdad quiere saber mi nombre señor? Asia Argento- contesto la chica con un tono feliz

-Mucho gusto Argento-san y no me digas señor, mi nombre es Tsunayoshi Sawada, siéntete libre de llamarme Tsuna- contesto el Décimo Vongola

-Entonces mucho gusto también, Tsuna-san, feliz de conocerte- dijo Asia con un tono de felicidad en su voz

La conversación fue interrumpida por un niño que se tropezó y raspó su rodilla, razón por la cual empezó a llorar, al percatarse de la situación, aquella monja fue de inmediato y le dijo a aquel chico

-Oye pequeño, los hombres no lloran, déjame ayudarte- dijo la monja.

De inmediato de sus manos brotó una luz de color verde que hizo recuperar la rodilla de aquel niño

-Jejeje muchas gracias hermana- dijo aquel niño para irse jugando del lugar

-!Eso fue increíble!, Argento-san ¿Cómo hiciste eso?- dijo Tsuna anonadado

-Es el regalo que dios nuestro señor me dio, a esta bendición de dios se le conoce como Sacred Gear y con ella puedo curar las heridas de cualquiera- señalo la chica un anillo con una joya de color verde que broto de su dedo medio de la mano izquierda

-¿Que? Sin duda es un poder increíble- señalo el Décimo, el sabía ya que el también tenía un Sacred Gear en el, pero no tenía idea alguna de como se veían, ni siquiera para que servían por lo que fue la primera vez que vio uno.

-Si, increíble- dijo aquella chica con algo de tristeza

El Décimo Vongola pudo notar con rapidez que la chica no se sentía bien al hablar de su poder, por lo que cambio el tema