Ascenso De La Faccion De La Mafia

Capitulo 6: Una Catástrofe

Kalawarner y Mittelt se quedaron estupefactas por el hecho ocurrido frente a ellas, habían visto morir a los tres humanos que intentaron hacerles frente, pero unos segundos después estaban  de pie desnudos con llamas en su frente.

-Estos humanos,¿Son magos? No, no siento poder mágico viniendo de ellos, entonces ¿Que significa esto?- Se pregunto Mittelt confundida al no saber que habilidad habían empleado los chicos con llamas en sus frentes

-¡LLEGARÉ A ASIA AUNQUE ME CUESTE LA VIDA!- Grito el Vongola corriendo hacia la puerta a toda velocidad con su pistola atorada en sus boxer arrebasando e ignorando a Kalawarner

-¡Oye, ni creas que...!- dijo Kalawarner intentando agarrar a Tsuna, pero fue alcanzada por un fuerte golpe horizontal que la envío hacia una pared haciéndole mucho daño, el culpable fue Matsuda quien portaba una larga banca de la iglesia y la blandia como si no fuera nada

El Décimo Vongola ya estaba cerca de cruzar la puerta a toda velocidad, cuando Mittelt se dió cuenta, creo una lanza de luz en su mano derecha que apuntaba a Tsuna

-¡Como si fueras a pasar!- grito Mittelt haciendo el movimiento para lanzar su ataque, pero un objeto salió volando, arrancadole la mano derecha y estrellándose contra el altar detrás de la chica, el culpable fue Motohama quien lanzo un pedazo de escombro del tamaño de una bola de boliche como si no fuera nada

-¡¡TSUNA LLEGARÁ CON ASIA AUNQUE NOS CUESTE LA VIDA!!- Dijeron los chicos al unisono

-¡Malditos bastardos!- dijo Mittelt enojada poniendo su atención en el duo de llamas rojas

-Ponernos las manos encima así, ¡voy a matarlos!- Exclamó Kalawarner hacia el duo de llamas rojas

Ambas Angeles caídos se olvidaron del Vongola que ya había cruzado la puerta y se encontraba bajando unas escaleras en espiral a toda velocidad.

Debido a todo el ruido que se hizo Freed se despertó de dónde estaba, levantándose con un bostezo y sacudiendo el polvo de su ropa tomando la atención de sus dos jefas
-¡Freed! Así que estabas vivo, toma tu espada y hazte cargo ahora, ayúdanos a acabar con estos humanos- Exclamó Mittelt hacia el peliblanco
Freed aún con sueño se tallo los ojos para despertar volteando a ver con mirada de sueño hacia los dos chicos desnudos con llamas rojas en su frente. El peliblanco se tomo un tiempo para procesar la información mientras se rascaba el culo y realizaba sonidos con su boca en señal de sueño. Después de pasar unos segundos viendo la situación saco su pistola y le disparo a una ventana que estába cerca, dió un gran salto para llegar allá, se dió la media vuelta para dirigirse hacia quienes eran sus jefes y les dijo:
-¡Vayanse a la mierda perras escandalosas! Si uno de estos tipos que controlan las llamas de colores ya es un problema, dos son muerte segura, yo no peleó con la mafia, he pasado años huyendo de los cobradores de la familia Tomasu y no me van a alcanzar solo porque los pendejos de mis jefes se metieron dónde no debían, aunque la verdad me da tristeza ver qué ustedes se mueran, me hubiera gustado cogermelas aunque estuvieran ya muertas, pero no pienso regresar aquí, su cuerpo tendrá que ser gozado por los gusanos-
-Freed maldito, ¿Que estás diciendo? Estos humanos no pueden ser de la mafia- Dijo Calawarner dudosa de lo que su antiguo empleado decía
-JAJAJAJA Me doy cuenta que cometí un error de a quien ofrecerle mis servicios, puse mis habilidades al trabajo de unos Ángeles caídos que no saben una mierda del mundo, esas llamas que están ahí se les conoce como:
"Llamas de cuánto quieres masturbarte por última vez"
Y son el arma sello del bajo mundo, bueno, me voy putas, tal parece que no nos veremos nunca, iré a ver si ese viejo de Galilei tiene algo entretenido para mi en Tokyo- dijo el peliblanco a las dos mujeres mientras saltaba de la ventana para irse
-¡Maldito traídor!- grito Mittelt mientras esquivaba un pedazo de concreto que Motohama le lanzo.