Capitulo 13: Aplastante Derrota

243 26 33
                                    

Lanzas de luz eran disparadas por todo el lugar, chocando entre si y destruyendo una parte del gimnasio donde aterrizaban, las culpables eran dos ángeles caídos que intercambiaban golpes pese a ser compañeras

Mittelt, la angel caído con coletas miraba con furia y desdén a quien tuvo la deshonra de llamar compañera hasta ese momento

Raynare, la angel caído de largo cabello negro tenía un rostro de angustia por lo que sucedía

-¡Deja de detenerme!- Exclamó Mittelt con furia

-Si no lo hago matarás a ese humano y provocaras una mala situación para Azazel-sama y Shemhazai-sama- Exclamó Raynare creando una lanza de luz

-Ya te dije que ellos estarán bien, es imposible que unos simples humanos por más fuertes que sean puedan ser una amenaza para nuestros lideres, además tu también escuchaste a Kokabiel-sama, va a ocurrir una guerra de todas formas y eso es inevitable, da igual quién se una o no a la batalla, y es momento de que le saquemos provecho a esta situación, ese niño de allá es nuestro boleto para ver esa guerra desde arriba- Comentó Mittelt envistiendo a Raynare con un golpe de su lanza

-Pero aún así, muchos de nuestra raza van a morir en el proceso- Dijo Raynare defendiendose del golpe

-¡Eso me importa un carajo! Mientras nuestros líderes sobrevivan y nosotras estemos junto a ellos por mi todos los demás se pueden morir ¿Que mierda te pasa Raynare? Estos últimos días solo estuviste en silencio perdida en tus pensamientos y ahora que te dignas a hablar es para decir estupideces- Respondió Mittelt volviendo a lanzarse al ataque mientras preguntaba:
-¿Que no fuiste tu quien decidió matar a éste niño que nos ordenaron vigilar?¿Y también quedarse con el Sacred Gear de Asia Argento? ¿Que fue lo que cambio? ¿Porque ahora estás intentando salvarle la vida a éstos humanos que estuviste a punto de dañar tan fácilmente?-

-Yo...¡Yo no intento salvar la vida de nadie! Simplemente no quiero que Azazel-sama me odié- Raynare repelía los ataques que la mujer de coletas le daba

-JA, Eso solo es una excusa de cobardía, ¡Oh! Espera ¿No me digas que por fin salió a la luz tu humanidad? Tu lado humano al encontrarse con otros humanos en peligro descongeló tu frío corazón y ahora intentas salvarlos, ya lo entiendo todo, esté tipo de estupideces es lo único que se puede esperar de una humana- Escupió Mittelt para su amiga

Las palabras de su compañera hicieron que Raynare, quien hasta ese momento se encontraba con un rostro inseguro, lo cambio por una cara de cólera y rabia, se avalanzo con una lanza de luz en la mano y a toda velocidad arremetió contra Mittelt, con un movimiento veloz de su lanza le hizo una cortada en el rostro mientras la pelinegra gritaba con irá:

-!NO SOY UNA HUMANA DE MIERDA!¡EN TU PUTA VIDA VUELVAS A REPETIR ESO!-

Después de ese arrebato de enojo Raynare se dió cuenta de la acción que realizó, lamentando lo que hizo dijo con una voz apagada:
-Mittelt...Lo siento...yo no quería-

La herida que le ocasionaron en la cara al ángel de alas negras y coletas iba desde el lado derecho de su frente y cruzaba hasta la mejilla izquierda, la sangre corría por su rostro, se limpio el corte con su mano mientras rechinaba los dientes con rabia, convocó dos lanzas de luz en cada mano mientras exclamaba con enojo:

-...Entonces así quieres las cosas ¡MALDITA SEMI-HUMANA ASQUEROSA!- Terminó de decir lanzando ataques llenos de odio contra su antigua compañera, empezando así una pelea a muerte

En el otro lado del lugar aquel hombre misterioso de traje de gala color negro que había salido de la nada se encontraba peleando junto a los dos exorcistas aún convida, sin embargó estaban demasiado heridos y con miedo, pues Freed Sellzen, el sacerdote psicópata había cometido actos barbaricos frente a sus ojos desde que llegó a ese lugar, y ahora estaba usando el poder que la raza humana del bajo mundo privatizó sólo para sus miembros, por consiguiente aquella llama era desconocida para los dos exorcistas, lo que la hacía más de temer

Ascenso De La Faccion De La MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora