Cadenas que Atan al Pasado ¡Finalizada!

Capítulo 23: Los Cobardes Mueren Muchas Veces Antes De Morir

-Permita que le vuelva a explicar mi señora.- le hablaba de manera solemne aquella chica de nombre Sati.- Citlalli-Sama me ha llamado y me dijo que le ofreciera este entrenamiento.

-No veo como tirarme a un volcán activo me sirva como una especie de entrenamiento.- dijo Kaori rascándose la cabeza, se asomo dentro del cráter y sintió un fuerte calor que venía del fondo.- No, definitivamente no entiendo como eso me hará más fuerte.

-De dónde ella es, los volcanes son grandes deidades que si se enfurecen, pueden tragarse a un pueblo entero y dejarlo vuelto cenizas. Aunque son leyendas, tiene razón al decir que son deidades, si elimina al dios que reside en este volcán, podrá eliminar el sello de su poder.

-¿Sello?.- Kaori ladeo la cabeza, se suponía que ya lo había roto hace mucho.

-Si, como ya sabe el poder de los chamanes reside en la fuerza de su mente.

-Lo sé, cuando viaje al pasado eso me quedo claro y estoy consciente, mi mente se fortaleció y la prueba de ello es que yo me encuentro aquí ahora mismo.

-Si, Citlalli-Sama esta de acuerdo con ello, pero no es del todo correcto.-Kaori hizo un gesto de sorpresa.- Aún hay algo en su interior que lo bloquea y no permite que pueda usar todo su poder. Al pelear aquí, pondrá al límite su poder defensivo y ofensivo al evitar que la lava consuma su cuerpo y pelear para matar a ese dios. Y sin mencionar que estará muy cerca de la muerte, el simple hecho de soportar todo el calor que hay y la sensación de sofoco al nadar en lava... Será muy bueno para su cuerpo.

-¡Mi señora!.- ni a Kuroneko ni a Kitsune les intereso que los vieran otros humanos.- estaría cometiendo suicidio al lanzarse ahí, por favor recapacite y ¡¡no lo haga!!

-... - Kaori no respondió se limitó a cerrar los ojos.

-¡Kaori-Sama!.- la más alterada era Kitsune, Kaori volvió a abrir los ojos y la miró como si fuera una niña, acarició su cabeza con cuidado.

-Se muy bien lo que sucederá. Si fallo, mi cuerpo será consumido por el volcán y ni siquiera el rey Chamán logrará revivirme. Si muero... Hao estará...

-SI YA LO SABE, ENTONCES... ¡¿VÁMONOS!.- grito Kitsune desesperada e intento jalarla de la manga, Kaori no se novio ni un centímetro, se mantenía inmóvil en su lugar.

-Sati, por favor ¿Podrías dejarme a solas con mis espíritus?.- se giro a verla y le dedico una sonrisa.

-Está bien.- Sati hizo una reverencia y se marcho. Cuando vio que ya estaba lo suficientemente lejos, se giro para ver a los ojos a sus fieles espíritus.

-Kitsune, Kuroneko. Estoy consiente de los peligros que tendré que correr. También estoy consiente que de mi dependen muchas vidas. Soy lo único que se interpone entre la destrucción total de la humanidad y su supervivencia. En cuanto yo muera aquí dentro, Hao no se quedará quieto, es capaz de incluso matar a todas las guardianas. Pero también estoy considerando otra cosa.- camino hacia el cráter, podía escuchar el sonido burbujeante de la lava.- mi poder es fuerte, pero si esta sellado, no me sirve de nada porque me desmayare a media pelea. Incluso, estuve a punto de que me tomarán como rehén por eso.

-Mi señora...

-Pero hay algo más importante que hay que tener en cuenta: los grandes espíritus cumplen el más grande sueño del Rey. Tengo que convencer a Hao que desista de eliminar a los humanos, de lo contrario, tendré que unirme a la pelea de Yoh.

-¿Pero... No ama a Hao-Sama?.-Kitsune estaba sorprendida por la actitud de Kaori.

-Si, lo amo con todo mi corazón. Pero una vez me cegó ese amor y esta vez no será así. Lo detendré antes de que el salga herido de nuevo.- se giro y camino hacia Sati.- ¿Hay algo más que tenga que saber antes de lanzarme al volcán?