XIX-I

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No me lo podía creer, estaba en los Ángeles con Aiden y la verdad jamás habría imaginado acabar allí ni que fuera tan sumamente rico la verdad. Aquello parecia todo un un sueño o una situación que solo pasa en las peliculas o en los libros pero era algo que realmente se sentía bien. Estuve todo el viaje de ida durmiendo así que me perdí las vistas desde el cielo pero eso lo compenso las vistas del hotel hacía la ciudad las cuales decir que eram preciosas se quedaba corto.  La verdad si alguien me hubiera dicho hace meses que estaría aqui y además con el simplemente me hubiera reído pero esto era algo real y que estaba pasando. Después de ducharnos y nuestra gran sesión de sexo en la ducha, me llevo a cenar y estuvimos por la playa lo que hizo que todo aquello fuera demasiado magico y pude conocer a muchos famosos y famosas. 

-Ponte a dormir, mañana será un día largo...- Fue lo que me dijo pero yo solo podía pensar en que se fuera de aquel balcón para que durmiera a mi lado, ya que no me gustaban las camas ajenas a la mía.
-Ven conmigo porfa.....- Lo dije casi como suplicando
-Ahora voy Iria, no me iré a ningún lado.- me abrazo por el hombro y no me solté del.
-Aiden....¿Que crees que hay más allá de dónde alcanza nuestra vista?
-No sabría decirte pero estoy seguro, pero estoy seguro que en una de esas estrellas nos aguarda un hueco a los dos.-
-Gracias Iria.....-
-¿Porque me das las gracias Aiden?
-Por hacerme ver que amar a una persona no solo es decir te quiero, es demostrarlo, un día y otro, e insistir, y nunca cansarte, y tú has demostrado eso conmigo, y yo pienso hacerlo contigo.-
-¿Vas a demostrarme el que?
-Que merezco tener ese hueco en tu corazón....- Ahí fue cuando mi mundo por una milesima de segundo se paro ante sus palabras, el ya tenia un hueco en mi corazón pero realmente queria ver como se lo ganaba y como se esforzaba por conseguirlo. 

Al día siguiente me desperté y vi que Aiden no estaba en la cama por lo que había salido a hacer alguna cosa, decidí cambiarme del pijama y ponerme ropa comoda. Al bajar vi a más famosos en la sala del desayuno, pero de todos ellos me acerqué a hablar con Tom Holland.

-Hola, ¿podría hacerme una foto contigo? 

-Claro, si.

-Oye estoy saliendo con Aiden  ¿Lo conoces? puede que no pero como todo el mundo parece conocerlo aquí pues quiza...

-Si estas con ese chico debes estar como una princesa.-Dijo mientras me sonreia, era bastante majo y reconozciendolo si me pidiera matrimonio dejaria a Aiden ahora mismo.

Mientras seguíamos hablando Aiden apareció estuvimos hablando un rato los tres juntos hasta que yo me fuí a por mi desayuno, arramble con todo lo que me cupo en el plato y me senté. Unas personas se acercaron a hablar con Aiden mientras desayunábamos tranquilamente lo cual me molestó bastante pero lo intenté ignorar bastante porque a el se le veía feliz con tanta gente. Tras todo el momento del desayuno fuimos a vestirnos más o menos elegantes, yo simplemente me puse un chandal con los que vas con rollo.

-¿Podrías arreglarte menos?- soltó irónicamente.
-Que te den.- y le lancuna almohada.
-Te arrepentirás de eso.- 
-Aiden ¿que vas ha hacer?......-
-Tu verás....- El muy gilipollas empezó a hacerme cosquillas por todo el cuerpo sin parar mientras me costaba respirar.
-Pa....para.....- Pero el seguía con ello.
-Anoche no decías eso.....- sonrio y nuestras bocas acabaron a pocos centímetros.
-Soy distinta del día a la mañana....- Dije con cierta superioridad.
-Iria......Te quiero......- pero al decir esto se le cambió la expresión de la cara lo cual mi cara parecía un cuadro al oir esas palabras y la suya también, no es que yo no supiera amar que si sabia lo que pasaba es que no estaba lista emocionalmente a volver a decir esas palabras otra vez, fue mi madre quien se llevo esas palabras de mi boca la ultima vez que la vi y por ello había sido incapaz de decirlas los ultimos años.
-Aiden.....yo......me haces sentir la mejor mujer del mundo y eres genial en todos los aspectos pero yo no sé si todavía estoy lista para decirte eso.....-
-¿Estarás de broma?.....- Se le notaba bastante molesto.
-N....no.....
-Osea, ¿Entonces porque coño estamos montando todo el paripé de un mes de prueba si no vas a intentar quererme?- El empezo a levantar la voz y tenia miedo de que pudiera llegar a pegarme y decidí taparme con la almohada.
-Aiden.....perdona....no quería decirlo así....-
-No importa...... olvidalo......es una gilipollez hacer todo esto.....vamos a pasar el fin de semana ya y nos volvemos a Nueva Jersey, al pueblo de donde tuvimos que quedarnos y cada uno por separado.- tire la mochila en la mesa que iba a llevar con la sorpresa que la había preparado para decirla que realmente si quería hacer oficial todo esto y dejar el paripé.

Gritame en silencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora