Esta historia merecía un epílogo y si bien éste no es el mejor para "Atado a ti" creo que era interesante hacerles saber como Harry, Ginny, Ted... y otras personitas continuaron, cada una tiene algo que decir y por supuesto algo que entregar (Eso espero)
Desde ya les agradezco que lean el último capítulo de esta historia.
"Sólo bastan las ganas, quizás un poco de experiencias que la vida nos da... el resto es responsabilidad absoluta de la imaginación que con poco nos hace feliz"
Epílogo
― ¡Te digo que no! ¿Cuántas veces lo debo repetir?
― Ginny no seas testaruda...
― ¡Es un niño de cuatro años, idiota!
― ¡No me insultes!
― A veces necesitas ser insultado para que entiendas, te aseguro querido que hablo con mucha sinceridad ― Harry profirió un suspiro resignado, la miró a los ojos con seriedad.
― Es una tradición...
― Muy estúpida...
― Que sin embargo deseo llevar a cabo con mis hijos.
― No harás absolutamente nada.
― Quiero ver como te interpones en medio de mis tradiciones y mis hijos.
― ¡Nuestros hijos!
― ¡Dios Ginny, ya basta con eso!
― ¿No te importa en lo más mínimo mi estado al contradecirme? ― Preguntó ella herida haciendo un puchero con los labios, gesto que enterneció a Harry.
― Cariño, te prometo que no pasará nada...
― Eso nadie me lo garantiza ― Harry la miró con horror.
― ¿Nadie te lo garantiza? ¡Soy tu esposo, el padre de tus hijos!
― ¡El mismo padre que los quiere subir a una escoba a temprana edad, inconsciente!
― Por Merlín, Ginny, James tiene diez años, Albus ocho, Lily seis, Alan cuatro... - Frunció el ceño - ¡Hemos tenido hijos cada dos años, mi amor! ― Ella bufó exasperada.
― Y Daphne tiene dos años y medio, entenderás que no permitiré que cometas tal locura con mis bebes.
― Pero cielo, si es algo normal, algo que siempre imaginé hacer con mis hijos ― Explico él con aire soñador, sonriendo de un modo angelical que no convenció para nada a su esposa.
― Montar en una escoba a niños que ni siquiera tienen control de sus actos es inapropiado Harry, ¡Se pueden accidentar!
― ¡Eso no pasará! Yo estaré con ellos...
― No me importa, no harás semejante locura.
― ¡Pero Ginny!
― Pero nada...
― ¡Esto es injusto, yo también soy el padre de esos niños, por tanto yo también decido que hacer...!
― ¡Eres un inmaduro!
― No alces la voz cielo, eso te hace mal - Dijo Harry intentando controlar su temperamento y de paso apaciguar el de su mujer.
― ¡Tú me haces perder la paciencia! ― Fue un milagro escuchar las risas de sus hijos ante sus gritos, Teddy entraba riendo a carcajadas con Daphne en sus hombros y Albus y Alan iban a cada lado del joven. Ginny y Harry miraron a los niños con el ceño fruncido cuando entraron en la habitación de Lily y Dahne.
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Atado a ti
RomancePasan los años, pero el dolor, el orgullo, y el amor sigue intacto... los errores no se olvidan fácilmente. Harry y Ginny se ven obligados a estar esposados para poder entenderse. ¿Lo harán odiándose como ellos lo hacen?