Radio Roller

Capítulo 005

Laryssa Vólkova

Al salir del gimnasio volví a escuchar pasos detrás de mi, pero está vez era diferente, si era una persona y no solo mi imaginación, decidí voltearme para ver quién era y así me encontré con una de las porristas que me jodian todo el tiempo.

-¿No deberías estar en el partido con las demás?- pregunté confundida ya que era una porrista y más que nadie ellas deberían estar ahí apoyando al equipo de la escuela.

-Tu familia y tu son muy valientes para venir aquí, no son bienvenidos, escoria como ustedes deben volver a su estúpido pais- gritoneo haciendo rodar mis ojos.

-Tengo cosas más importantes que escucharte decir lo mismo una y otra vez- Conteste ya cansada -quítate de mi camino- le ordene.

-Nunca seguiré las ordenes de una estúpida comunista- Dijo con tono de burla y esa fue la gota que derramo el vaso, me abalance sobre ella estrellando mis nudillos contra su "hermosa" cara la cual era tan espantosa cómo su personalidad, eso verdaderamente se sintió muy bien a pesar de haber lastimado mi mano, pero valió la pena cada mísero segundo, no me detuve hasta cinco golpes más, después de eso la deje ahí en el pasillo no sin antes haberla amenazado, sabia que no era correcto pero lo que ella hacia tampoco lo era, después de eso me dirigí al cuarto donde jugaríamos esta noche, ahí ya estaban todos, aparentemente habían encontrado un sustituto para Lucas, era su hermana Erica Sinclair.

-Hasta que por fin llegas, creímos que ya no vendrías- Comento Jeff a lo que yo negué.

-Me encontré con una porrista que no me había dejado en paz todo el año, al fin le di lo que merecía, aunque creo que fue un grave error, ya que al ser rusos nos están vigilando con una lupa y buscan cualquier escusa para echarnos de aquí, espero que no diga nada...- confesé asustada, no había pensado en las consecuencias que traería hacer algo como eso, realmente espero que ella no abra la boca, todos se quedaron callados, claramente los había espantado -creo que será mejor que me vaya, lo siento- me disculpe y salí del salón, mi corazón palpitaba demasiado rápido, tenia mucho miedo y no solo de perder mi amistad con los chicos de hellfire club, si no de que lo que haya hecho pudiera perjudicar a mi familia.

Camine hasta llegar al baño donde me lave la herida de mis nudillos, no me había dado cuenta de que me abrí, me puse papel después de haberla limpiado y salí del baño dispuesta para irme a casa pero me encontré con Gareth recargado en la pared alado de la puerta lo cual me sorprendió bastante, pareciera que me estaba esperando y efectivamente lo estaba haciendo.

-¿Que haces aquí? deberías estar terminando la campaña con los chicos- Pregunté deteniendo mi paso.

-Vi que entraste al baño entonces decidí esperar afuera para hablar- Respondió con una sonrisa en su cara -realmente vine aquí a ver cómo estabas, los chicos se preocuparon- añadió.

-No lo creo, de seguro están asustados como todos de que les pueda hacer algo y añadiéndole que soy rusa da puntos extras- Continúe caminando hacia la salida pero el me acompañaba.

-Créeme que no, somos los raritos de la escuela, ellos también nos temen a nosotros y tú nos agradas, ¿Qué fue lo que pasó con esa chica?- Pregunto mientras me abría la puerta para que saliéramos al estacionamiento y nos sentamos en una de las banquetas que se encontraban ahí.

-Desde que llegue me ha insultado y hoy no se que paso, simplemente explote y la golpeé- Respondí bajando la mirada.

-Todos tenemos un límite y ella lo paso está noche, es normal que te hayas sentido así y que le hayas hecho daño- trato de tranquilizarme poniendo su mano en mi hombro.

-Yo lo entiendo, pero el simple echo de ser rusa lo pone peor, todos nos están vigilando esperando que demos un paso en falso para podernos culpar... En el peor de los casos echar- respondí preocupada por lo que podría llegar a pasar si se enteran que fui yo la que la golpeó.

-Lo se, entiendo que sea muy complicado para ustedes tener los ojos encima en todo momento, pero no estas sola Lay, cualquier cosa que llegue a pasar quiero que sepas que estaré, que estaremos contigo- Mire su cara después de que finalizara y tenia una mirada pura junto con una sonrisa sincera, una que no había visto antes y realmente me inspiraba confianza, una que no era capaz de explicar.

-¿Pero que pasara si ella llega a hablar con alguien y les dice que fui yo quien la golpeo?-por primera vez en este momento lo dije viéndolo a los ojos, aunque no pudiera verme a mi misma sabia la expresión de miedo que tenia mi rostro, no quería perjudicar a nadie con lo que hice, mucho menos a mi familia, nunca me lo perdonaría.

-No lo hará, las porristas son muy cobardes, se que no dirá nada y si llega a hacerlo diremos que estuviste con nosotros todo el rato desde que saliste del partido, tu tranquila, ¿si?- Era la primera vez que alguien me inspiraba tanta confianza y seguridad, me sentía segura con el, con todos ellos.

-Gracias...-fue lo único que pudo salir de mi boca antes de poder abrazarlo con fuerza, a pesar de que intente retenerme no pude y me solté a llorar, se que esta acción sorprendió mucho a Gareth, pero no me aparto, al contrario me correspondió y me consoló.

-No es nada, tranquila- hizo una pequeña pausa para continuar -Volvamos con los chicos, deben estar preocupados- yo asentí y limpie mi cara la cual estaba empapada de lagrimas para después pararme junto con el y volver a entrar a la escuela para dirigirnos hacia el salón.

Cuando entramos nadie hizo preguntas y actuaron como si nada hubiera pasado, ellos ya habían empezado a jugar sin nosotros pero nos reincorporamos sin problema.

(...)

Solo nos quedaban 15 puntos de vida y los únicos vivos eran lady Applejack (Erica) y Dustin, yo ya sabia que íbamos a morir pero Erica dijo que hasta morir, aunque Gareth había dicho que no era literal. Erica había lazado los dados y como consecuencia todos habíamos hecho unas caras muy graciosas esperando a que tocara 20 y así fue.

-¡SI!- Gritamos todos al mismo tiempo dejando a Eddie sin palabras, todos saltábamos de emoción, ¡habíamos ganado! Ni siquiera nosotros sabíamos como le habíamos hecho pero lo hicimos, después de recoger nuestras cosas y guardar todo lo de D&D salimos del salón, aparentemente cuando salimos también se había acabado el partido, los tigres habían ganado, todos nos despedimos y al final Eddie se me acerco.

-Lay, no te preocupes por lo que paso, ella no dirá nada y si lo hace te cubriremos, después de todo eres del equipo- giño su ojo izquierdo y yo me despedí dándole las gracias para irme a buscar a mi familia.

Cuando los encontré escondí mi mano en mi chaqueta y nos fuimos al carro, ellos me contaron como había sido lo genial de Sinclair al encestar ese balón a ultimo momento yo les conté lo bien que me pase con mis amigos y como habíamos hecho planes para el verano haciendo que mis padres se vieran orgullosos orgullosos.

Hola chicos, no saben cuan agradecida estoy con algunos lectores que me han estado apoyando dejando su estrellita o simplemente leyendo está historia, nos vemos el próximo viernes ❤️