Ella dormía tranquilamente en su cama, cuando de la nada escuchó un ruido que la obligo a levantarse rápidamente y caer parada en el suelo.
-¡Quien está ahí!-dijo alzando su tono de voz y cuando enciende la luz. Ve a su nuevo vecino, los cuales no s...
Me termino de cambiar y salgo de los vestidores y pongo el bulto con mi ropa en mi coche. Conduzco hasta mi hospedaje. Abrí la puerta de el apartamento y cuando abro la puerta veo a Alessia que se había quedado dormida en el sofá. Y una sonrisa se forma en mi rostro. Dejo el bulto en el suelo y me acerco a Alessia. Agarro una sábana y la coloco sobre su cuerpo y dejo un beso en su mejilla. Luego voy hacia la cuna y veo al bebé que estaba despierto. Lo agarro entre mis brazos.
-Vamos a darnos un baño-susurré, me dirijo al baño y entro a la tina con el bebé. El bebé estaba en mi pecho. Derepente la puerta se abre y veo a Alessia que se había acabado de levantar. Ella me regala una sonrisa.
-Por un momento me asuste-dijo Alessia y la miro.
-Hay espacio para ti también-dije y ella sonríe. Alessia se comienza a desnudar y entra a la tina. Ahora ella tiene a Ángel en su pecho.
-Te amo-dije y Alessia sonríe.
-Yo más-dijo Alessia y ella me mira.
-Me escogieron en esta universidad-dijo Alessia y sonrio.
-¡Pero que buena noticia mi amor!-dije con una sonrisa y dejo un beso en sus labios.
-Mañana Ángel cumple sus cinco meses-susurró Alessia y asiento y la miro.
-Quiero tener otro hijo, pero que esta vez sea una niña-dije y ella suelta una carcajada me
-A mi no me molesta, pero primero quiero estabilizarme con Ángel y contigo y después que vengan los que quieran venir-dijo Alessia y beso sus labios.
*****
-¿Que hacemos aquí?-preguntó Alessia y la miro.
-Vamos a hacer la pirueta-dije y ella niega.
-Sabes que no puedo Bryan-dijo Alessia y la miro.
-No quiero volver a escuchar esa frase, tú si puedes, tú si lo lograras, así que vamos-dije y la levanto y ella pone sus pies sobre mis hombros.
-Confía en mi-dije y Alessia asiente. Alessia salta y hace la pirueta y cuando va a caer la sostengo en mis hombros de nuevo.
-¡Lo pude hacer!-dijo Alessia emocionada, la bajo y rápidamente la abrazo.
-¡Lo lograste mi amor!-dije emocionado y ella tiene sus ojos llenos de lágrimas.
-Bravo, acabo de ver lo que acabaste de decir-dijo una mujer, acercándose a nosotros.
-Fue magnifico, ¿perteneces al equipo de las porristas?-preguntó la mujer y Alessia niega.
-Vaya, pues debo extenderte la invitación a que pertenezcas al grupo de las porristas-dijo la mujer y miro a Alessia con una sonrisa.
-Le agradezco su invitación, pero no puedo aceptarla-dijo Alessia y la mujer la mira.
-La propuesta aún sigue sobre la mesa-dijo la mujer y se marcha.
-¿Porque no aceptaste?-pregunté y Alessia se sienta y yo me siento a su lado.
-Mi mamá murió en un incendio, es por eso mis cicatrices en la rodilla y en donde tengo el tatuaje. La herida de la rodilla fue bastante grave, yo salvé a mi hermano del incendio, pero mi papá no logró sacar a mi mamá. La última vez que la vi, fue haciendo el último baile de porristas-dijo Alessia y la miro.
-Alessia, tú mamá quiere verte feliz, y estoy seguro que ella quiere verte haciendo lo que tanto amas hacer. ¿No lo has pensado?-dije y ella me mira.
-Además, mi responsabilidad es cuidar de Ángel-dijo Alessia y la miro.
-Eso no es excusa, podemos contratar a una niñera-dije y ella me mira.
-Ya tengo una respuesta, y es no-dijo Alessia y decidí no insistirle más.
Narra Alessia
-Espero que ganen-dije y besó a Bryan, él sonríe.
-Que mejor que dedicarte cada punto a ti y a nuestro hijo-dijo Bryan y salgo para sentarme a observar el juego.
-Necesitamos una porrista de emergencia, la principal se acaba de leccionario y sino nos ganará la otra universidad. Carajo-escuché una voz. Observo a mi bebé y luego veo a Bryan que estaba reunido con sus compañeros.
Mamá estaría feliz si lo hago...
Me levanto del bliche y voy hacia el dirigente de las porristas. La mujer del otro día se me queda mirando.
-Solo será una vez-dije y ella sonríe y todos comienzan a celebrar.
-Bien, nececito que le expliques a el chico como es la pirueta. De el bebé me encargo yo-dijo ella tomando a Ángel entre sus brazos. Las porristas me llevan a los vestidores a maquillarme, peinarme y a ponerme la ropa (Foto Multimedia). Estaba muy nerviosa. Luego de practicar la pirueta nos mandan a salir. La música comenzó, y empecé a hacer la rutina que practiqué hace unos minutos atrás. Luego veo a Bryan, que se quedó petrificado al verme.
Llego el momento de la pirueta, el chico me ayuda a pararme sobre sus hombros. Todos estaban eufóricos y la imagen que viene a mi mente es mi madre, sentada en los bliches gritando mi nombre. Una sonrisa se forma sobre mis labios y es cuando hago la pirueta y caigo en los brazos del chico. Todos comienzan a gritar y aplaudir.
-¡Muy bien!-gritó la dirigente emocionada. Vamos a vestidores y a Bryan me abraza.
-Lo hiciste muy bien mi amor-dijo Bryan con una sonrisa y besa mis labios.
-Suerte-dije y el sale. Por mi parte salgo a ver a Bryan a jugar. La dirigente se sienta a mi lado y tomo a mi hijo entre mis brazos. El juego estaba muy intenso, hasta que solo faltaba un punto para desempatar y elegir el equipo ganador. Es cuando Bryan viene corriendo de atrás y mete la bola al canasto y todos comenzamos a aplaudir y a gritar emocionados. Comenzaron a tirar confeti, rápidamente me bajo corriendo y abrazó a Bryan.
-¡Ganaste mi amor!-dije con una sonrisa y el besa mis labios.
-No lo hubiese logrado sin ti-susurró y todos comenzamos a celebrar.
-Calma, ahora diremos el ganador de los dos equipos de porristas-dijeron por el micrófono y Bryan toma a Ángel entre sus brazos y yo me voy al equipo de porristas.
-El equipo porrista ganador es el que representa la universidad de...-el que hablaba por micrófono no decía quien era y eso empezó a desesperar.
-¡Harvard!-dijeron y todos me abrazan y celebramos. Los chicos me levantan en el aire y suelto una carcajada. Bryan me miraba con una sonrisa.
*****
-Lucieron espectaculares los dos hoy-dijo Javier quien estaba junto a su novia y estábamos haciendo hamburguesas en el grill. Más bien Bryan y Javier. Ángel se había quedado dormido y decidí ir a la habitación para dejarlo sobre su cuna. El olor a barbacoa me comenzó a revolcar mi estómago y voy corriendo a vomitar.
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