6. Mamá, acabo de matar a un hombre.

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-Capitán Stone, ¿quería verme?

-Destro, ¿has localizado a la madre de Aoi?

-Tras varias inspecciones en los registros de la población de Ohio, mis hombres han dado con ella, está de camino.

-Es una gran noticia. Por fin podremos hablar con ella.

-Capitán, tengo una pregunta.

-Dime.

-¿Por qué tuvo tanta confianza en un joven que no controla los poderes que se le han dado?

-Me recuerda a ti cuando te convertimos en Jaikiden, ¿te acuerdas de eso, Destro?

-Sí... Lo recuerdo, capitán. Pero yo soy un adulto que domina el combate como ningún otro, Aoi solamente es un joven de quince años con una armadura alienígena que amenaza a la raza humana.

-Yo no me he sentido amenazado, todos merecemos oportunidades. Destro... Dime una cosa, ¿tú crees que el hecho de que SAM eligiera a ese joven fue casualidad?

-Si me pongo en modo analista, yo pienso que SAM sólo pudo tomarle a él ya que era el único que se encontraba en el lugar de los hechos. Por otro lado, su fusión mostró una gran afinidad.

-Es confuso, ¿verdad?

-Claro que lo es, pero, ¿por qué no preguntarle al propio SAM? Sonsacarle información.

-Ya lo hemos intentado, no responde. Tampoco podemos arriesgarnos a torturas con el objetivo de sacar información, haríamos daño al chico.

-Permítame el atrevimiento, pero esta es la mayor putada que hemos tenido en la C.H.A.S.E, descontando el incidente de Ray G.

-Acordamos no hablar de eso, Destro. Será mejor que nos dirijamos a hablar con la tan aclamada madre.

-Esto es absurdo...

Momentos de espera. Qué silencio tan incómodo. Parece la sala de espera de un psicólogo, solo puedes hablar para tus adentros. Qué pesada es esta situación, no se puede cortar la tensión ni con un cuchillo carnicero.
Los Jaikiden decidieron trasladar a Thorcan a la sala de interrogaciones. No está solo, Tauro entró a la sala para "vigilarlo". La desconfianza y la inseguridad predominaban el momento. Thorcan no quería hablar con Tauro. En alguna ocasión trató de abrir la boca pero no le salían las palabras.

Hablar con Tauro para sentirte más seguro es como hablar con un león hambriento para sentirte más vivo.
Thorcan trató de mirar a puntos aleatorios, no quería cruzar la mirada con Tauro, ya que este no le quitaba ojo de encima.
"¿Quién ganaría en una pelea, Tauro o SAM?" Pensó Thorcan. Allí donde se ve, Tauro ha demostrado ser capaz de derribar edificios con solo un golpe. Por otro lado, SAM ha demostrado muchas habilidades, y algo le suena a Thorcan de que todavía no lo ha mostrado todo. Es un agobio, tener poderes de la noche a la mañana.
¿Ganará SAM? ¿Tauro es capaz de liberar su Taikoku y poner a SAM en su lugar? Decidió reservar sus dudas para un momento menos incómodo.
Un segundo, Tauro se está moviendo. Da tres pasos y se pone frente a Thorcan. Hacen contacto visual y Tauro se sienta en la silla frente a él.

-Aoi Zorcan. ¿Por qué lo has hecho?

Qué pesado, que se dice Thorcan. Parece que le cuesta pronunciarlo, pero es cansino de oír.

-¿Por qué hice el qué?

-Fuiste corriendo hacia esa cosa. ¿Por qué? ¿No te paraste a medir el peligro?

-Algo en mí me dijo que tenía que ir corriendo hacia eso. Podía haber gente en peligro. - Thorcan dio un suspiro - Yo... Quería...

-Querías ser un héroe. Claro, todos sois capaces de ser héroes en el fondo. Pero solo algunos como yo tienen el coraje de ponerse la capa en la espalda.

C.H.A.S.E.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora