1-Marvel Magia [HP x Marvel]

Capítulo 176: Percepciones

24 de enero de 1995, Riddle Manor Tierra 2

(Punto de vista de Tom Riddle)

Tom Riddle, o Lord Voldemort como se le conocía hoy, no estaba seguro de cómo se sentía acerca de su progreso en la conquista de la Gran Bretaña Mágica. Las cosas iban bien, en el reclutamiento de sus fuerzas. Los hombres lobo estaban casi todos bajo su control con Greyback como alfa, los gigantes llegarían pronto del continente, los dementores ya le habían jurado la oportunidad de alimentarse de los muggles; los salvajes no podían verlos, por lo que el Estatuto no se violaría.

Incluso, su círculo íntimo estaba de vuelta a su lado, aunque disminuido por su estadía en Azkaban, todavía eran luchadores temibles que estaban recuperando rápidamente su poder anterior.

Todo iba según lo planeado, incluso el Ministerio ignoró su regreso gracias a las manipulaciones de Lucius del hombre idiota que eligieron como Ministro. En lo que respecta al Señor Oscuro, no ha habido un solo revés, aparte de recuperar la profecía que les concierne a él ya Potter.

Era algo que planeaba rectificar pronto, especialmente con Rookwood de nuevo a su lado. El ex Innombrable estaba muy bien informado sobre los detalles del Departamento de Misterios y le había dado información muy detallada sobre las protecciones alrededor de los orbes de profecía.

Era un hechizo antiguo, creado para proteger a los videntes y profetas de aquellos que los usarían. Nadie podía tocar un orbe de profecía que no fueran sus sujetos, lo que significa que solo él y Potter podrían recuperarlo.

Eso constituía un enigma. Las protecciones del Departamento de Misterios, si bien no son inexpugnables para alguien de su poder, alertarían a todo el Ministerio de intrusos, lo que revelaría su regreso. Esto significaba que, para poder obtener el orbe de la profecía, primero tenía que estar listo para revelarse y terminar sus preparativos. O eso o de alguna manera hacer que Potter se lo consiguiera, pero eso era una posibilidad remota en el mejor de los casos, el chico estaba constantemente bajo la vista de Dumbledore.

Voldemort tenía sus propios espías en Hogwarts, a saber, Severus Snape, que podría decirle si el niño abandona el castillo, en caso de que Dumbledore decida usarlo para obtener la profecía él mismo. Entonces, en lo que respecta a la profecía, todo estaba en espera hasta que él estuviera listo.

Todavía era imperativo que escuchara adecuadamente el contenido de la maldita cosa, al menos para su propia tranquilidad. No podía arriesgarse a perder su cuerpo nuevamente, incluso con su inmortalidad asegurada por los Horrocruxes, conseguir otro cuerpo con la sangre de Harry Potter sería mucho más difícil, ahora que Dumbledore sabía que lo necesitaba para eludir la protección de la sangre sucia.

Hablando de los Horrocruxes, sus mayores creaciones y mayores tesoros fueron las primeras cosas que revisó cuando regresó. Bellatrix le había dado acceso a su libro mayor de cuentas de Gringotts, lo que significaba que podía comprobar si alguien había entrado en la bóveda para sacar algo, puesto que estaba nervioso de que el Ministerio intentara confiscar el oro de Bellatrix por sus crímenes. Afortunadamente, nadie había intentado tocar las bóvedas de Lestrange desde que fueron a Azkaban; Los duendes se han negado a involucrarse en asuntos mágicos. Era la primera vez que las pequeñas bestias servían para algo, en opinión de Voldemort.

Había ido a la choza de los Gaunt para ver si alguien había intentado encontrar el anillo. En cuanto al resto, su barrera de alarma de sangre sobre la caverna inferior no se ha activado en décadas, lo que significa que el guardapelo no ha sido tocado. Ahora, la diadema estaba a salvo en Hogwarts; estaba seguro de que nadie había descubierto la habitación oculta en el séptimo piso, e incluso entonces, nadie sería capaz de encontrar algo en el desorden que es la habitación de las cosas ocultas, incluso si de alguna manera tuvieran acceso a la habitación.