Pebble Brain(Descontinuada)

♡・O4・

Los jueves del consejo estudiantil fueron probablemente la parte menos favorita de la semana de Fundy. Está casi seguro de que no habría sobrevivido al club tanto tiempo si no hubiera sido por el nuevo estudiante de primer año que se unió aproximadamente un mes antes. Hizo las cosas un poco más fáciles tener a alguien más a quien poner su trabajo cuando casi todo el club le puso su trabajo a él.

¿Fue justo? Absolutamente no. Pero dado que era el único oficial de segundo año entre los jóvenes y los mayores, gracias al respaldo de Wilbur en su primer año, se sintió un poco gratificante tener a alguien más joven que él para molestar. Si bien no había sido necesariamente malo, le había dado al menos la mitad del trabajo que se le encomendó al niño más joven, sin esperar mucho en la forma en que se terminaría.

La mayor parte era trabajo en el que Schlatt estaba holgazaneando, y parte era trabajo que Quackity no podía hacer por sí mismo. Sin embargo, Fundy realmente no culpó a Quackity, ya que realmente hizo todo lo posible para hacer su propio trabajo y ayudar a Fundy siempre que pudo. El problema era que el presidente del consejo estudiantil siempre tenía algo que decir cada vez que hacía eso.

Comprensiblemente, la ayuda casi había cesado, y ahora el vicepresidente solo le daba al niño una mirada lastimera cada vez que Schlatt arrojaba otra pila de papeles sobre el escritorio.

Hoy, sin embargo, fue un poco diferente cuando vió al hombre pasar junto a él hacia el moreno más pequeño que había estado garabateando diligentemente los papeles que Fundy le pasó. No estaba seguro de por qué se sentía nervioso por Tubbo, pero observó en silencio cómo se desarrollaba la escena.

"Hm... ¿Qué tienes ahí?" La voz de Schlatt estaba cubierta con una falsa curiosidad que envió un extraño escalofrío por la columna vertebral de Fundy. No había ninguna razón para creer que haría algo si el chico decía la verdad, pero aún había un aura extrañamente incómoda en la pregunta.

Tubbo no pareció darse cuenta, ya que se animó con una sonrisa demasiado inocente, "¡Oh! Estoy ayudando a Fundy con este papeleo". Se volvió hacia el pelirrojo en cuestión y Fundy sacudió la cabeza desesperadamente en un intento de que se callara. "De hecho, ya casi termino si quieres verlo".

Fundy sintió que la mirada del presidente se posaba en él y se sintió casi como un animal enjaulado que lo atrapó en su asiento sin siquiera mirarlo. Está seguro de que si fuera un animal, sus orejas habrían estado pegadas a su cabeza.

"¿Es eso así?"

Con una respiración profunda, Fundy finalmente habló en defensa de sí mismo. "Querías que estuviera hecho para mañana y yo tengo mi propia tarea y cosas que hacer. Era esto o perder la fecha límite".

"Deja al niño en paz, Schlatt", la voz de Wilbur habló desde su lugar en la parte de atrás. Había estado ayudando a Niki con algo en su computadora y probablemente solo levantó la vista porque sintió que Fundy estaba siendo amenazado.

Fundy no estaba seguro de qué había hecho que el mayor lo adoptara como hijo el año pasado, pero no se molestó en quejarse cuando se ganó un protector confiable contra otros mayores menos amigables.

"¿Por qué no te quedas fuera de mis asuntos, Wilbur?", respondió Schlatt, dirigiendo una mirada al otro hombre que dejó en claro a todos que no solo estaba hablando de la conversación actual. Wilbur le devolvió la mirada por un momento antes de finalmente abrir la boca para responder.

"¿Te he dicho alguna vez lo bonito que te queda ese ojo morado?"

La habitación quedó en silencio. Nadie más lo había mencionado durante esa semana, aparte de algunos susurros aquí y allá, pero Wilbur parecía ser el único que siempre tenía las pelotas para hablarle así a Schlatt. Por el brillo asesino en sus ojos, estaba claro que su querido presidente no era un gran admirador de eso.