Regreso a una Nueva vida

¿Seguro?

El despertador sonó temprano, como el día anterior, eran las 6:30 dela mañana y, a pesar de que Atem era madrugadora, esta vez le costó levantarse. La noche anterior casi no había dormido, pues no paraba de dar vueltas a lo sucedido con Kaiba y no sabía con que car aacudiría a trabajar el día de hoy. Según Yugi debía actuar como si nada hubiese pasado, aunque no sabía si sería capaz de hacerlo una vez estuviese cara a cara con el castaño, pues nunca se le había dado bien ocultar las cosas ni había tenido nunca mucha necesidad de hacerlo. Pero esta vez era diferente.

Se duchó rápidamente y se vistió con unos pantalones negros, zapatos del mismo color y una camisa blanca, tomó una chaqueta de cuero negro y metió el teléfono móvil en el bolsillo de esta, se la puso y bajó con total desgana a la cocina. Era aun temprano y esta vez tanto Joey como Yugi seguían dormidos, por lo que fue en silencio hacia la cocina tratando de no despertarlos. Realmente no tenía apetito pero tomaría aunque fuese una taza de te, eso le recordó que no tenía en el trabajo y guardo unas bolsitas de te en otro delos bolsillos de la chaqueta, tomó una taza para el agua cuando alguien llamó al timbre de la casa. ¿Quién sería tan temprano? Miró el reloj de la cocina, eran las 7:15. Atem caminó rápidamente hacia la puerta ya que, quien quiera que fuese, no dejó de tocar al timbre con insistencia. Diablos! Iba a despertarlos a todos en la casa!

Una vez llegó a la puerta y la abrió, se topó con alguien que no esperaba ver.

-!Kaiba!¿Qué...?-

-Buenos dias!-exclamó el menor de los Kaiba con una sonrisa-Venimos por ti.-dijo saludando saliendo del lateral de su hermano-Nos a llamado uno de los encargados de la empresa con la que contactaste ayer para desayunar hoy para hablar de un posible trato.-aclaró el menor al ver la confusión en la cara de Atem

-Atem ¿quién es?-se escuchó la voz adormilada de Yugi que bajaba las escaleras en pijama con cara de sueño, frotando uno de sus ojos cerrados por el sueño-Kaiba, Mokuba ¿Qué hacéis aquí tan temprano?

-Venimos a por Atem. Seto-dijo mirando hacia arriba a su hermano que permanecía serio y en silencio-¿No llamaste a Atem?

-Es posible que lo olvidara-dijo sin darle mas importancia, a lo que Mokuba suspiró

-Lo siento Atem, creí que te había llamado, si que eres madrugadora entonces-dijo al verla ya lista para trabajar

-Iba a desayunar-se excusó

-Bueno pues desayunas en la reunión con nosotros-dijo con una sonrisa Mokuba tomándola de la mano y arrastrándola ligeramente hacia afuera de la casa

-Vamos-dijo sin mas Kaiba yendo hacia el coche-vamos justos de tiempo

-Hermano te he dicho que seas amable!-regañó el menor a su hermano mientras corría tras él.

-Bueno-suspiró Atem-me voy entonces Yugi-dijo con un tono algo desganado, a lo que el menor se acercó a ella y, empinándose un poco, le dio un beso en la mejilla.

-Buena suerte-dijo guiñándole un ojo a su hermana, que se sonrojó levemente-Trátamela bien Kaiba!-exclamó al ver que el castaño los miraba desde la puerta del coche con una ligera expresión de molestia en su cara. ¿Yugi le había dado el beso a propósito para molestar a Kaiba? Se preguntó Atem a lo que miró en protesta al menor que le sonreía sacándole la lengua al tiempo en que le cerraba la puerta en la cara a la tricolor. Esta suspiró nuevamente y se dirigió hacia el coche, entrando en la parte de atrás junto a ambos hermanos.

Kaiba se encontraba sentado a su lado y Mokuba frente a ellos, pues el coche era tipo limusina. Jamás se acostumbraría Atem a ir en ese tipo de vehículos.