Tras mudarse a una nueva ciudad para iniciar la universidad; Harry se encuentra con sucesos extraños en su nueva casa, así que con ayuda de sus amigos y su "pasado experto en cazar fantasmas" se adentra a una exhausta investigación que lo hará termi...
Sus ojos miraban con concentración la jugada que había en sus cartas, observó de reojo nuevamente las cartas ya lanzadas y suspiró tomando una nueva carta, deshechó una a cambio y cubrió bien su jugada.
— Tu turno —Murmuró mirando atento las cartas moverse.
— Creo que acabo de ganar — Sonó desde la grabadora mientras bajaba sus cartas.
— Otra vez — Hizo una mueca. — No soy nada bueno en este juego ¿podemos hacer otra cosa?
— ¿Que cosa? — Preguntó curioso.
— No lo se, qué tal si me cuentas más sobre ti — Se encogió de hombres el rizado.
— Vengo de Doncaster, tenía 23 años, estudiaba publicidad, no sé qué más decir —Murmuró.
— Piensa en algo que te haga feliz, lo primero que venga a tu mente y lo dices a la cuenta de tres ¿de acuerdo? Uno, dos, tres.
— No sentirme solo —Dijo rápidamente. — ¿y tú?
— El azul, un azul muy particular — Aclaró su garganta sonrojado.
— Harry ¿Puedo hacerte una pregunta? será algo incómodo.
— Uhm ¿Entonces para qué la harías?
— Creo que tienes razón — Suspiró antes de continuar. — Por favor, no debes tener sentimientos románticos hacia mi.
El rizado tragó saliva con un extraño sentimiento en el pecho, rio nervioso y lo frotó disimuladamente.
— Eso, eso sí que fue incómodo — Murmuró.
— Eres increíble, eres tan atractivo, el chico más guapo que he visto para serte honesto —Murmuró. — Es solo que no quiero que te aferres a algo imposible, considero que mereces algo mejor que oír una tonta voz.
— Tu voz no es tonta — Frunció el ceño.
— Harry — Suspiró insistente.
— Se lo que quieres decir, Lou, y quizá creas que esto es una tontería pero hoy fui a ver a un chico que dice ser vidente — Aclaró su garganta antes de continuar. — Él dice que las almas se manifiestan a las personas solo cuando ellas lo desean, así que quizá pueda verte de esa forma.
— Pero no sé hacer eso — Murmuró.
— ¿Lo has intentado? ¿Has deseado que te vea?
— No lo se, quizá no lo he pensado demasiado.
— Tal vez cuando lo pienses entonces podré verte —Murmuró.
— No quiero que tu enamoramiento escale más, Harry.
— No me importa como seas — Miró sus manos. — Nunca me había sentido así antes, me lo dices como si pudiera controlarlo, Louis, pero no puedo.
Levantó la mirada en un intento de mirar a Louis, sus ojos estaban rojizos por el aviso de sus lágrimas queriendo escapar.
— No puedes tocarme ¿eso está bien para ti? — Suspiró.
— No me importa, el sentimiento es más grande que el contacto físico, Louis.
Talló sus ojos con frustración y suspiró dejando sus manos en ellos por algunos minutos, solo tratando de controlar sus sentimientos, siempre había sido un chico sensible.
— Harry — Murmuró Louis. — ¿Puedes verme ahora?
El rizado levantó la mirada lentamente observando un aura luminosa frente a él, poco a poco la silueta de un hermoso chico se presentó, con una ligera sonrisa y sonrojo en sus mejillas.
Harry creía que no podía ser más atractivo que en sus fotografías pero se equivocó, suspiró con una boba sonrisa sin poder evitarlo.
— Eres tan hermoso — Confesó.
— Ay Hazz — Sonrió sonrojado.
El chico de ojos verdes acercó más su mano a la del chico más bajo pero no pudo tocarlo, no había sensación alguna, solo aire, el castaño hizo una ligera mueca pero rápidamente Harry se incorporó.
— No importa, de verdad, me gusta verte — Sonrió.
— A mi también, quiero decir yo ya podía verte — Rio nervioso.
— Louis, por lo que me dijiste hace rato... debo asumir que tu no — Trago saliva haciendo una pausa pero fue interrumpido de inmediato.
— Tuve un pasado tormentoso, ricitos, pero cuando llegaste por esa puerta con esa carita toda nerviosa — Rio levemente al recordarlo. — Algo en mi pecho se sintió bien, se sintió tranquilo, al principio debo admitirlo yo... quería echarte de aquí, no me gustaba la presencia de alguien más pero cuanto más pasas aquí, más crece esa tranquilidad en mi ser, y si aún no queda clara mi respuesta — Llevó su mano a la mejilla del rizado. — Si me gustas.
— Al menos puedo sentir tu tacto — Susurró cerrando sus ojos lleno de alegría. — ¿Podrías abrazarme?
— Claro que si — Murmuró.
Rodeó el cuerpo de Harry con sus brazos y suspiró dejando un beso en su sien, el rizado tragó saliva tratando de evitar el sentimiento de impotencia al no poder corresponder a su abrazo.
***
Las horas habían pasado más rápido y Harry tuvo que obligarse a descansar al menos un poco, Louis prometió quedarse ahí, así que tras algunos minutos de descanso, el rizado comenzó a sentir un cosquilleo en la piel.
Gimió bajito removiéndose en la cama y abrió sus ojos encontrándose a si mismo boca arriba, con la sorpresa de Louis sobre él, el chico de rizos sonrió dormitado y suspiró.
— Bésame — Pidió.
Louis no lo pensó dos veces, se inclinó de inmediato besando sus labios, para Harry describirlo era imposible, una sensación única y de cierto modo placentera, el cuerpo del castaño se sentía sobre el suyo.
Las caricias se volvían más intensas mientras el tiempo continuaba avanzando, los gemidos bajitos de Harry se volvieron más fuertes y agudos con cada roce de los labios de Louis en su piel, quemaba su piel de una manera agradable.
— Lo-Lou — Gimió el rizado con los ojos cerrados. — Vamos, hazlo — Suplicó con un susurro.
El castaño jadeó volviendo a besar sus labios mientras hacía un vaivén con su cadera sobre el cuerpo de Harry, quien disfrutaba de todo el tacto.
Harry se giró por sí mismo y apartó su pantalón de pijama, Louis trago saliva acariciando con suavidad su trasero y besó su nuca despacio. Tras minutos de estímulos y placer por fin se volvieron uno.
Los gemidos de Harry incrementaron acompañados por los de Louis, el rizado apiñaba las sabanas con un agradable cosquilleo en el estómago mientras el castaño besaba su oído y mordisqueaba de vez en cuando su quijada.
Los ojos de Harry se volvieron blancos ante el placer que le estaban provocando y sus pies se enroscaron a la vez que su estómago se contraía en un increíble orgasmo, tras un par de estocadas más, Louis tuvo una reacción similar.
Besó la mejilla de Harry repetidas veces y suspiró con tranquilidad mientras el rizado volvía a dormir por el cansancio.
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Me encontré este dibujo en Pinterest y me recordó a la fic <3
