𝐋𝐎𝐒𝐓 ⎯ 𝐊𝐌

⛈️ 08

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Los golpes en la puerta terminaron despertándolo, pero no se levantó hasta después de cinco minutos, pensando si había soñado o en realidad alguien estaba llamándolo.

Se levantó perezoso y con dolor de cabeza para dirigirse a la entrada, a medio camino escuchó más toques en la puerta y gruñó con fastidio. Sí habían venido a molestarlo.

—¿Qué? —sin importar quién estuviera del otro lado, espetó en cuanto abrió y se sorprendió un poco de ver a Jungkook —. Kook, ¿Qué haces aquí?

—Pensé en venir a ver si estabas vivo, gracias al cielo veo que sí —Jimin empezó a caminar hacia el interior de su casa sin cerrar la puerta, dejándolo pasar —. ¿Qué te pasó? Te ves mal.

—Ay, gracias, que bonito despertar en la mañana y que te digan eso —sin voltear a verlo, le alzó el dedo corazón mientras entraba a la cocina.

—Perdón, estoy preocupado por ti —Jungkook dejó en la barra desayunadora unas bolsas de mercado que traía consigo y se acercó al castaño quien tomaba un vaso de agua.

—No he dormido nada, no tiene mucho que llegué a casa.

—Te llamé anoche, varias veces, ¿Por qué no respondiste? —preguntó sin despegarle la mirada, notándose preocupado.

—Estaba de fiesta, Jeon, si no te respondí fue porque estaba borracho —dejó el vaso en el fregadero —. No debes preocuparte tanto, soy un hombre adulto, me sé cuidar.

—Yo lo sé, pero nunca sabes cuando puede ocurrir un accidente, solo pasa y eso me tenía preocupado, hasta revisé las noticias.

—Kook, no tienes que hacerla de padre conmigo, de verdad.

Jungkook se quedó en su sitio viendo cómo su mejor amigo hacía camino a su habitación.

¿Hago mal en preocuparme por él? Pensó.

Él solo quería el bienestar de Jimin, nunca tendría otra intención. ¿Era tan malo eso?

—Minie, espera —siguió sus pasos, alcanzándolo justo cuando el castaño comenzaba a envolverse en la sábana de nuevo —. Mi intención nunca es juzgarte, ni la manera en la que vives tú vida ni en ninguna forma, solo me gustaría saber de vez en cuando que estás bien.

—Lo estoy, es solo que ya no quiero tener que darle explicaciones a nadie. ¿Puedes cerrar bien las persianas? No quiero luz —Jungkook cumplió su petición sin poner peros, después caminó hacia la cama con intenciones de acostarse.

—Hazte a un lado —Jimin no estaba seguro si dejarlo acostarse con él era lo correcto, pero no había nada más que quisiera en ese momento que dormir y si para lograrlo tenía que dejarlo entonces lo haría.

Jungkook se acomodó a un lado suyo, quedando semi sentado recargado en el respaldo de la cama.

—Pretendo dormir todo el día, deberías irte —sugirió.

—No, me quedaré aquí, tú descansa —respondió con voz suave mirando sus pies sobre la oscuridad de la habitación.

—¿Ahora vas a cuidarme? —preguntó con un tono casi brusco y burlesco.

Jungkook sintió una punzada en su pecho, ¿Era dolor? ¿Molestia?

—¿Por qué estás últimamente así conmigo?

El castaño abrió los ojos confundido con la pregunta emitida, ¿Estaba teniendo una actitud distinta con Jungkook?

—¿Qué quieres decir?