Hola,
perdí la perspectiva totalmente. Me refiero a todo, no hay punto medio ni espacio seguro. Mesiento ahogada, tan inmersa que no veo salida. No digo que sea una situación particularmente mala, simple y sencillamente que esta siendo muy complicada de ponderar.
Estoy en un buen momento. Realemente no tengo ninguna queja, pero aun así busco motivos para no ser feliz. Solo veo lo que me falta y no veo lo que ya tengo. Me tengo a mi. Eso es más que suficiente. No sabes cuanto tiempo me costo recuperarme.
Lo peor, es que soy conciente de que el miedo esta hablando. No soy yo, no es mi voz, es el miedo convertido en ansiedad. Estoy dudando, no me gusta dudar. Me gusta la certidumbre, me gusta saber. Me gusta estar tranquila, pero siento que no lo merezco. Ahí esta el problema.
Tu no eres el problema, él no es el problema, esto no es el problema... yo, bueno, no yo. El problema esta en mi mente.
No me quiero comparar, no quiero ser nadie ni nada más que yo. Estoy en la bendita lucha interna. En la desgastante batalla campal, de si permitirme ser feliz o dejarme morir en mi misería, ahogada por mis miedos. Quiero salir de este espiral de autodestrucción, quiero respirar y sentirme viva, agradecida, quiero tener esperanza, quiero, quiero, quiero...
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Cartas de Romina
Teen FictionQuerid@: Lo único que busco es un poco de esperanza, ¿como la puedo encontrar si estoy estancada? Nada parece mejorar y solo me gustaría saber que las cosas realmente van mejorando.