Vampire Crown ⊰⊹ฺ (KookTae AU)

vingt et un

"Un, dos, tres. ¡De nuevo!"

Una vieja televisión hacía sonar una chillona voz, aquella de una señora haciendo movimientos extraños a los ojos de Jin.

— Dale, Taehyung. Esto te ayudará para cuando tengas un hijo. — sonrió Jimin, sentado en aquella enorme pelota de ejercicio.

— Jimin, no sé si puedes notar que soy hombre, no puedo dar a Luz. Mucho menos concebir. Soy humano, afortunadamente — alzó las cejas el peligris. Agradeciendo al cielo qué no tenía que pasar por ese horrendo proceso.

El estomago de Jimin era demasiado grande y, por lo tanto, pesado ante los ojos de Taehyung.

—Mejor dímelo a mí, es más probable que yo lo tenga después de lo qué pasó ayer. Me siento mal, no creo resistir esta situación. — Seokjin a penas se movía en la pelota, pensando que esto resultaba muy ridículo.

Taehyung simplemente soltó una carcajada, pensando qué sus amigos no podrían ser mas extraños entre sí.

Un par de días antes

Taehyung cayó cansado, con los ojos sumamente hinchados sobre el cuerpo de Jeon en aquel frío suelo.

— Ni siquiera me dejaste contestar... — Susurro el pelinegro. Besando suavemente la cabellera de aquel cuerpo sobre él que se encontraba totalmente dormido —. Creo que voy a necesitar alimentarlo lo más que pueda cuando despierte. — suspiró Jeon.

— Jungkook...

Al escuchar aquella voz, jeon inmediatamente miró hacía abajo. Poniendo su dedo a la mitad de sus labios en forma de callar el ruido qué pudiera perturbar el sueño de Taehyung.

— ¿Puedes venir?. — Prosiguió Namjoon en un susurro.

Aquel asintió lentamente, tomando a su amado en brazos para posicionarlo en la cama y cobijarlo. No sin antes dejar un beso en su mejilla y salir lentamente en la habitación.

— ¿Que pasa?. — respondió serio, cerrando la puerta por detrás.

Una fugaz mirada se dio a Jin, quién estaba al lado. Sin embargo, no lo volvió a mirar — Lo lamentamos. — Interrumpió Jin.

— Mira, Jin. Yo sé que una tarde con tú esposo y todo se arregla entre ustedes, está bien; sin embargo, Taehyung estuvo todo el día encerrado, no me dejó pasar — suspiró —. Aquí no nos arreglamos así, fue muy irrespetuoso todas las cosas que le dijiste, y no te voy a permitir que lo hagas llorar o sentirse mal.  Hay límites Jin. Taehyung es una persona muy sensible y me sorprende en demasía qué no lo sepas a este punto; el hecho de qué el se sienta cómodo y aceptado aquí es mí mayor prioridad, estoy seguro qué lo entiendes. Estoy intentando todo lo qué puedo para que Taehyung tenga el hogar que se merece y se sienta amado, no voy a permitir qué vengas a inquietarlo de esa manera — respondió freneticamente, más con un semblante relajado —. Taehyung tiene su propio proceso, y ese no es el tuyo. Tampoco su contexto familiar no es el mismo; te recuerdo que Taehyung viene de un mundo lleno de abusos y soledad. Mí prioridad es él, es qué sane, qué se sienta seguro. Estoy de acuerdo con tú preocupación sobre transformarlo, no lo haré. Si eso te preocupa, entonces mantente tranquilo; no le quitaré su vida a Taehyung. Todo lo que hemos hecho es con consentimiento de los dos, y eso está bastante claro; Taehyung decidió quedarse y yo me controlé para no cometer un error; no somos niños, Seokjin. Sabemos cuidarnos. —

— Lo lamento. Estuvimos hablando un rato, me equivoqué. Pero, debes entender la situación Jeon. Namjoon cayó enfermo después de qué me convertí, gracias a mí coma, él ya era dependiente de mí sangre y yo no podía hacer nada — un leve apretón se presentó a la mano de su esposo —.  Yo aún tengo sangre, por eso Namjoon sigue vivo y estamos juntos, pero no sabemos cómo Taehyung vaya a reaccionar a todo esto, ni siquiera tenemos seguro que te ame para, literalmente, toda la eternidad.  —