Estaba sorprendida ante mi cambio de personalidad. Siempre había sido insegura y poco atrevida. No me habían llamado la atención los deportes extremos ni nada que se le pareciera. Siempre permanecías dentro de mi zona de comfort. Sin embargo, desde que había conocido a aquel chico descubrí que era astusta y que tenía una forma muy rápida de preguntar y responder en situaciones comprometedoras. No me asustaba con tanta facilidad como había pensado. Tal vez se debera a que nunca antes me había enfrentado a una sitaucaión similar, por lo que una parte de mi aun dormía... hasta ahora.
-¿Nada más? ¿Eso es todo? ¿No me vas a decir nada? ¿Solo tu nombre? ¿Y qué me asegura que ese es tu nombre de verdad?-
-No tengo que responder a nada, de igual forma, te quedas aquí-. Sopesaste lo que te dijo en aquel momento.
-Esa respuesta es algo ambigua. ¿Aquí? ¿Te refieres a solo esta noche? ¿En lo que resuelves todo tu embrollo? ¿O es que nunca voy a salir?- Continuabas habando con sarcasmo, pero seguías calmada.
Siwon dio un paso hacia ti, luego otro y luego otro más. En ese momento te sentíste más nerviosa que en cualquier otro momento de la noche. No pestañeaba.
-No sé qué voy a hacer contigo- confesó en voz baja.
Diste un paso hacia atrás.
-En realidad te ofrecí la respuesta. Te pedí que te fueras, pero te empeñaste en llevame contigo-.
-Si te hubiese dejado, te hubieran matado-. Un escalofrío recorrió tu cuerpo. -Esa maleta, tiene un dispositivo fácil de rastrear. Te hubiesen aniquilado si te encontraban con ella-.
-¿No quiere decir eso, que aún estamos en peligro?-
-En realidad no. Esta área está protegida por un campo magnético que bloquea cualquier señal. Puedes verificar tu celular para que lo compruebes. No llega ni la señal radial. Toda señal utililizada aquí proviene de un dispositivo especial que crea su propia señal-.
-Completamente coreano para mi. Solo entendí que no hay señal-. Me tomó por sorpresa la fuerza de la risa de Siwon en aquel momento. Parecía divertirse conmigo. En cambio, yo no le encontraba el chiste.
Alguien tocó a la puerta. El apartamento de Siwon tenía cámaras de seguridas, así que verificó quién llamaba antes de responder.
Abrió la puerta. Un hombre al otro lado comenzó a hablar.
-Están circulando el área. No me parece que vayan a bajar la guardia. Saben que desapareciste por aquí y les ha de parecer extraño. No creo que sea conveniente que salgan- dijo el hombre en un inglés torpe probablemente para que yo entendiera. Agradecí el gesto.
-En ese caso, necesitaremos ropa de mujer- dijo Siwon. El hombre le hizo una inclinación y se fue. Siwon se volteó hacia ti. -Lamento interrumpir tus vacaciones, pero me parece que te quedarás aquí algunos días. Hay televisor, radio, libros, comida...- comenzó a enumerar las cosas que podrías hacer cuando lo interrumpiste.
-¿Qué? O sea, que estoy siendo secuestrada y pretendes que agradezca la estadía en tu guarida secreta porque hay televisor y libros-. Siwon se acercó amenazante.