Los años pasaron, Katsuki e Izuku se volvieron cercanos en todo el tiempo que estuvieron juntos, se volvieron la compañía del otro, ayudándose mutuamente y trayendo paz al bosque.
Ellos vivían tranquilos y felices, sin complicación ni problemas, unas cuantas discusiones, pero nada que no se haya arreglado con el pasar de las horas.
Hoy era lunes y Katsuki debía salir al pueblo, Kirishima había enfermado y necesitaba medicamentos, no tenía dinero así que tendría que enforcarse en conseguir medicina para si pequeño animal.
— ¡Salgo al pueblo Deku! – tras aumentar la confianza en esos cuatro años, Katsuki también le puso un apodo siendo este Deku luego de notar la torpeza que el guardián solía tener con frecuencia.
— Está bien Kacchan, yo cuidare a Kirishima, ve tranquilo, por favor cuídate – el peliverde estaba preocupado, el rubio casi no dormía cuidando al pequeño animal y no quería que algo le pasara a su compañero.
— Lo hare, no llores mientras no este Deku – agarro su capa y su mochila para después salir por la puerta e ir en dirección hacia el pueblo.
Al llegar al pueblo ágilmente empezó a agarrar medicinas de los puestos, estaba cansado y distraído, las pocas horas de sueño le estaban cobrando en ese momento, le costaba mantener los ojos abiertos.
El cansancio hizo que no se diera cuenta de que lo vieron agarrando plantas medicinales.
— ¡OYE TU! LADRON! – varios hombres empezaron a perseguirlo, decidió correr con la poca energía que tenía, se adentro en el bosque intentado perderlos, pero era invierno y la nieve dejaba sus huellas en el camino.
Mientras tanto, Izuku había escuchado ruidos en el bosque, al ser un guardián podía escuchar los sonidos del bosque a kilómetros de distancia, de manera rápida se coloco su capa y salió en búsqueda del ruido, tenía un mal presentimiento.
Katsuki corría y corría, pero no lograba perderlos y sus piernas estaban fallando ante el sobre esfuerzo.
De repente escucho disparos y como había pequeños huecos en la nieve, lo estaban tratando de disparar.
Aumento la velocidad de sus piernas, llego a una pequeña montaña y decidió ocultarse detrás de ella.
— ¿¡A DONDE FUE!? ¡BUSQUEN A LOS ALREDEDORES! –
Katsuki pudo respirar un poco más tranquilo, empezó a relajarse y estaba a punto de irse, pero algo llamo su atención, un pequeño zorro fue visto por aquellos hombres y estos no desaprovecharon para intentar cazarlo.
Cuando uno de ellos estaba a punto de dispararle al zorro, el rubio se interpuso entre la bala y el zorro, recibiendo el impacto en el abdomen, esto alerto al zorro que salió a correr rápidamente.
Los hombres estaban por acercarse a quitarle la mochila al chico, les habían hecho perder al zorro, se llevarías su mochila como recompensa.
— Maldito mocoso, mira lo que causaste – uno de ellos pateo su cara y se fueron con sus cosas, dejando al rubio sangrando en medio de la nieve.
Un muy preocupado Izuku había escuchado disparos y yendo a una gran velocidad, llego al lugar donde escucho el ultimo disparo, encontrándose a un rubio tirado en el suelo con sangre a su alrededor.
Quedo en shock ante la escena, sus ojos se llenaron de lagrimas y reacciono corriendo hacia el de ojos escarlata.
— KATSUKI! ¡POR DIOS! ¿¡TE AYUDARE SI!? ESTARAS BIEN! ¡SOLO QUEDATE CONMIGO! – el rubio a punto de caer inconsciente saco unas cuantas plantas medicinales que tenía en el bolsillo.
— Ve con Kirishima…e-el las necesita ¿sí? Ayúdalo a el – con los ojos casi cerrados usaba sus pocas energías para procurar de su panda.
— ¡NO! ¡NO NO NO NO NO NO ME NIEGO A PERDERTE! ¿¡YO-YO TE AMO SI!? ASI QUE NO TE DEJARE QUE MUERAS ¿¡ESCUCHASTE!? –
El moribundo rubio agarro el rostro del de ojos verdes y lo acerco a él dándole un pequeño beso.
— Perdón por no poder darte mas que eso, cuida a Kirishima por favor, te amo…Izuku – con esas últimas palabras el corazón del rubio dejo de latir.
Los ojos de Izuku solo sacaban lágrimas, sus labios temblaban y su corazón no procesaba lo que había pasado, había perdido a la primera persona que amo.
— AAAAAAAAAAAAAAHHH!!! – la tristeza de Izuku era grande en ese momento, solo podía llorar y aferrarse al cuerpo inmóvil de su querido Katsuki.
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El Flautista - Katsudeku/Dekukatsu
Fantasi"- Se rumorea de un desconocido musico que recorre estas tierras, dicen que con su flauta puede llamar y controlar a los animales, que los hace bailar y cantar al son de su música.-" "- Algunos temen que también pueda controlar personas, algunos dic...