La tercera Winchester

Casa (2da Parte)

Missouri acepto regresar a la casa con los hermanos, sea lo que sea que esté pasando en la casa sería peligroso para los nuevos inquilinos. Los hermanos agradecieron cuando no los interrogó demasiado sobre el por qué estaban seguros de que lo que estaba en la casa era algo malo, ya que no querían ni revelar el secreto familiar sobre la menor ni de la repentina habilidad premonitoria que aparentaba tener Sam.

Cuando llegaron a la casa Jenny los recibió con su pequeño hijo en brazos, parecía alterada y tenía la respiración agitada, Sam y Dean luego de presentar a Missouri a una confundida madre y pedirle permiso para que recorra la casa por los supuestos "viejos tiempos", Jenny lo rechazó.

– Escucha, Jenny. Es importante – se apresuró Dean al ver que la mujer se daba la vuelta para cerrar la puerta, ganándose un fuerte corrector en la nuca por parte de la psíquica.

– Déjala en paz, ¿no ves que está angustiada? – Regaño Missouri mientras se adelantaba a los hermanos para encarar directamente a Missouri – perdónalos. Tiene buenas intenciones, pero no es la herramienta más afilada en el cobertizo – pidió la mujer para verdadero desconcierto del mencionado – pero escúchame.

– ¿Sobre qué?

– Sobre esta casa.

– ¿De qué está hablando?

– Creo que sabe de lo que estoy hablando. Crees que hay algo en esta casa, algo que quiere lastimar a tu familia. ¿Me equivoco?

– ¿Quiénes son ustedes? – pregunto manteniendo la sonrisa pero asustada.

– Personas que pueden ayudar, que podemos detener a esta cosa, pero debes confiar en nosotros. Solo un poco.

>>Demasiada confianza es la que le pides<< No pudo evitar pensar con sarcasmo la menor de los hermanos, se dio cuenta de que lo debió de pensar muy fuerte porque se ganó una mirada de reproche silenciosa por parte de Missouri, que le dirigió inmediatamente después de que Jenny les permitiera pasar.

A veces de verdad le sorprendía la facilidad de creencia de algunas personas con las que se cruzaban por el trabajo, y no debía ser solamente porque al parecer sus hermanos eran muy buenos físicamente, algunas de las mentiras o de las pocas verdades que decían, eran verdaderamente descabelladas e imposibles de creer, pero aun así las personas parecían aceptarlos sin mucha oposición, como si estuviesen siguiendo una especie de destino o guion mal escrito, del cual no soportan demasiada oposición hacia los personajes principales.

Una extraña pero familiar sensación a ruido blanco en la parte posterior de la cabeza y la voz de Missouri trajo a la más joven de los Winchester devuelta a la realidad. Al parecer se encontraban en la habitación de la niña, Altaira no se sentía muy cómoda ahí, como si su presencia en tal lugar fuese un pecado o algo por el estilo, así que decidió esperarlos justo antes del umbral de la habitación, acción que no pasó desapercibida para Missouri.

– Si hay una energía oscura por aquí, esta habitación debería ser el centro.

– ¿Por qué? – preguntó Sam.

– Era usado como guardería, Sam – comenzó a explicar Missouri, causando que Sam mirase al techo recordando la muerte de su novia y la forma en la que su madre murió, mientras la mujer seguía caminando por la habitación – Es donde todo pasó. ¿Eso es un EMF? – cuestiono molesta al ver a Dean con dicho aparato.

– Si.

– Novato – comento la psíquica sarcástica – No sé si ustedes estarán decepcionados o aliviados – comenzó a hablar mientras Dean mostraba a Sam las luces rojas del EMF activándose – pero esta no es la cosa que se llevó a su madre.