Capítulo 8.

155 11 0
                                    

El fin de semana que Paloma pasó con Mick creyó en verdad que era un sueño, le había dado una considerable cantidad de euros para que ella enviara a Colombia. Sus ojos se habían iluminado y Mick poco a poco empezó a verla con ojos de amor.

Le gustaba la tranquilidad con la que ella hablaba, pero le fascinaba la pasión que derramaba en la cama con el, ¿donde habría ella aprendido a hacer todo aquello? Se preguntaba Mick, una ola de celos llegaba cada que pensaba en qué tal vez, había alguien más que la había besado antes que el y eso le aterraba.

Mick, había jurado que solo sería una víctima de lo que el quería probar, pero en tan solo pocos días ahora era el quien parecía ser la víctima en toda esta situación. La quería tener a su alrededor y no porque quisiera controlarla sino porque empezaba a necesitarle, ella le acariciaba el rostro, le daba besos y siempre buscaba como tomarle la mano, eso a Mick le había derretido el corazón. Empezó a sentirse ¿amado?, esa era la palabra que el buscaba, sus padres y su hermana claro que lo amaban, pero el jamás sintió ese tipo de afecto que ahora Paloma le mostraba, uno donde era ella quien lo buscaba y no el.

Paloma lo había dejado en la casa mientras ella corría a hacer el depósito en el centro de la ciudad, Mick empezaba a empacar algunas cosas en el fondo del armario una pequeña cajita dorada se asomaba, Mick la saco del closet y la abrió, dentro habían cientos de fotografías de Paloma y su familia. El sonrió de inmediato al ver cómo ella sonreía en aquellas fotos y se preguntó ¿ella sonreía de la misma manera con el?, en el fondo había una fotografía, era pequeña y se podía ver un desgaste en ella. Era Paloma y a su lado estaba un chico, muy parecido a Mick. Ella estaba recargada en su hombro y el le daba un beso en la frente, Mick observo la mirada de ella, estaba perdida ante aquel chico.

El estómago de Mick empezó a retorcerse de coraje y de celos, ¿por que ella le miraba de aquella manera?, ¿sería aquel el americano que le habían hablado?, Mick volteo el reverso de la fotografía y en una letra manuscrita decía "Paloma, I'm Back for you. Joe" Mick trago en seco y colocó la foto al final de la caja. El no regresaría por ella, no lo haría porque ella ya le pertenecía a Mick y si en un furtivo intento de llevársela de su lado, el haría hasta lo imposible por detenerle.

Paloma, caminaba de regreso a casa cuando su tía Beatriz, la alcanzó por la calle principal gritando su nombre "Paloma" la voz de la tía Beatriz la hizo voltear enseguida.

"Hola Tía" saludo Paloma con una sonrisa en su rostro.

"¿Como has estado criatura?, hace tiempo que no nos visitas ¿todo esta bien?" Le pregunto la tía, moviéndola hacia un lado de la banqueta para que hablaran mas cómodamente.

"Oh si, todo esta Perfecto tía" dijo ella tratando de ocultar la evidente felicidad.

"Me han dicho que renunciaste ¿por que? ¿Te marcharás a Colombia?" El bombardeo de preguntas empezó y Paloma no sabía si debía de contarle sobre su romance con aquel chico, pero ella decidió ocultarlo, no quería que su madre se molestara y tampoco que su papa se preocupara por el hecho de ella emprender un viaje con un hombre que apenas conocía.

"Me.. me he conseguido un trabajo, en Irlanda... ¿recuerdas a Margarita? Me ha contactado y me han ofrecido un buen trabajo" dijo ella pidiéndole al cielo que su tía no supiera que ese nombre se lo acaba de inventar.

"No, no la recuerdo... ¿cuando te vas?, ¿tus padres ya lo saben Paloma?" Pregunto la tía Beatriz con una desconfianza absoluta.

"Ya.. ya he hablado con ellos" y era cierto, les había dicho que se mudaría y había vuelto a mentir "Tengo que regresar a casa tía, mañana por la madrugada me tengo que ir" volvió a mentir sobre su hora de salida.

Madness | F1 FanFicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora