Capitulo 32.

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Sebastian respiraba intranquilo mientras se paseaba por el patio, viendo la hora en su reloj.

Las horas pasaban y Paloma no regresaba, Corinna le regalaba de vez en cuanto una sonrisa nerviosa, ella también tenía ese sentimiento de preocupación. "Perdóname no puedo quedarme de brazos cruzados" Sebastián entrego a la pequeña a los brazos de su abuela y corrió hacia su coche para buscar a Paloma.

Manejo en silencio pero sentía como sus latidos rebotaban en sus oídos "Maldita sea" se decía a si mismo, miraba por todos los locales a ver si la lograba ver pero no aparecía, no a simple vista. Estacionó el coche y bajó a revisar cada uno de los locales y pareciera que Paloma no había pisado ningún lugar. Las manos de Sebastián empezaban a temblar de nervios, no podía permitirse que la promesa de Mick fuese rota.

La buscaba mientras su corazón latía con más fuerza, la encontró sentada en el fondo de una pastelería, llevaba un ramo de flores en su mesa y su mirada estaba centrada en su celular. "Paloma" hablo el con una sonrisa sincera, sacando el aire que tenía lleno de preocupación.

Ella levantó la mirada y Seb, sintió cómo su corazón se rompió, sus ojos eran rojos, su mejilla y nariz parecían haber llorado por horas, Seb, se arrodilló frente a ella y limpió las lágrimas secas que tenía en su mejilla. "¿Que pasa?" Pregunto el, acariciando con suavidad su mejilla.

"Lo... lo hecho de menos" Paloma le mostró las fotografías de la última carrera de Mick.

Seb sin dudarlo, la abrazo, Paloma se dejo caer en su cuello, sin ánimos para seguir llorando. "Nunca lo olvidare" murmuro y ella, Seb se separó un poco de ella, jalo una de las sillas en la mesa y se colocó delante de ella.

"No tienes porque olvidarlo, solo aprendemos a vivir sin ellos" Sebastián, jugo por un momento con su cabello "¿quieres que me quede?" Pregunto El mientras, ella se erguía con una sonrisa fingida.

"Nunca te vayas, te lo pido" Sebastián esbozó una media sonrisa y la atrajo hacia el, abrazándola y rodeándola con sus brazos. "Gracias por estar"

"Gracias por dejarme estar" Sebastián replicó al segundo "¿Y esas flores? ¿Las compraste?" Sebastian sintió curiosidad al ver las Hortencias en la mesa.

Paloma se removió incómoda y sintió un escalofrío que le recorrió todo el cuerpo "Me las han enviado" ella soltó un suspiro ruidoso.

"¿Ah si?" Pregunto Sebastian con curiosidad "Son preciosas a decir verdad, no sabía que te gustaban las flores" Sebastián la miro con dedicación.

"Me encantan, solo que Mick... a Mick le parecía una tontería que tuvieran que cortar las flores y el, prefirió regalarme un jardín con las flores" Paloma soltó aquella frase y el recuerdo de Mick invadió su mente.

Flashback *

Paloma mecía a los gemelos en la mesedora de la habitación de los niños, miraba una película romántica cuando Mick entro a la habitación haciendo el mínimo ruido posible.

"¿Cómo estás?" Había preguntado el mientras se acomoda a su lado. "¿Necesitas ayuda?" Pregunto Mick mientras acariciaba la cabeza de Fritz.

"Solo acomoda a Franz en la Cuna" Paloma le tendió al otro gemelo y Mick lo sostuvo como si fuese un tesoro precioso. "Fritz no a querido separarse de mi, apenas lo recuesto y abre los ojos" Paloma miraba con tranquilidad al pequeño que yacía en sus brazos.

"Supongo que le gusta tu aroma, a mi me encanta" Mick le regalo una sonrisa traviesa "Además que si yo pudiera dormir en tus brazos, todos los días, no lo cambiaría por nada" Mick le dio un suave beso en la cabeza.

Madness | F1 FanFicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora