Capítulo cuatro: Las reglas del juego

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Jennie de mala gana había aceptado que ese ángel permaneciera a su lado, con la condición de que no hablaría con nadie, no quería que nadie se enterase que él estaría viviendo con ella, lo que más le molestaba de todo esto era que al parecer sus amigas eran las más felices con todo lo que estaba sucediendo en su vida en esos momentos.

Jennie: ¿es que acaso no tienen trabajo, o algo más que hacer que estar aquí? – les preguntaba, ya que no se habían ido de su oficina y permanecían ahí hablando y riendo con ese joven "Cupido". –

Lisa: claro que tenemos trabajo, pero no todos los días puedes encontrar la oportunidad de hablar con Cupido.

Jisoo: y de paso poder reclamarle algunas cosas.

Rosé: es verdad, por ejemplo ¿por qué siempre nos mandas a los peores prospectos?

_____: ¿prospectos? No lo entiendo.

Lisa: a lo que se refiere mi querida ardillita es ¿por qué haces que nos enamoremos de hombres que terminan por rompernos el corazón?

Jisoo: y mujeres también...

_____: yo no he hecho eso, a ustedes tres les he dado la oportunidad de poder conocer a alguien, pero fueron ustedes quien al final decidieron no tomar la oportunidad.

Jennie: entonces lo que haces es solamente jugar con nuestros sentimientos, - dijo al mismo tiempo que se levantó de su silla, la rodeo, y comenzó a caminar en dirección a donde se encontraban, sin dejar de mirar directamente a _____. -

_____: ¿qué? No, yo no hago eso...

Jennie: claro que lo haces, lanzas tus flechas sin considerar el peligro y el daño que nos haces.

Jisoo: tranquila, Jen...

_____: yo no le hago daño a nadie...

Jennie: claro que sí, crees que por tener esas flechas puedes ir y lanzarlas a tu gusto sin importarte las consecuencias de tus actos.

Lisa: creo que lo mejor es que nos vayamos, - les había susurrado a sus amigas. -

Rosé: no creo que sea una buena idea, Jen está muy molesta, si nos vamos lo puede hasta golpear.

_____: mis flechas no las lanzo solo al azar, todas tienen un propósito.

Jennie: pues te prohíbo que lances alguna en mí ¿entiendes? No quiero que vuelvas a usar una de esas flechas conmigo.

_____: ¿por qué me dices todas esas cosas?

Jisoo: chicas, creo que lo mejor será que nos vayamos, fue un gusto conocerte _____, después hablamos, Jen... trata de no golpearlo por favor

Las tres salieron de ahí un poco preocupadas, entendían muy bien el enojo de su amiga, sabían por todo lo que había tenido que pasar con los últimos tres novios que había tenido, la desilusión que había experimentado con cada uno de ellos, pero, al ver a ese ángel y la forma en la que miraba a Jennie, entendían que él no era del todo culpable.

Jennie: estoy molesta, porque primero has hecho que me enamore de personas que solo jugaron conmigo, y cuando por fin he decidido olvidarme del amor, apareces y me dices que quieres que vuelva a exponer mi corazón, sabiendo que, de hacerlo, podría volver a salir herida.

_____: yo no fui quien te hizo daño.

Jennie: pues es como si así hubiera sido, porque fuiste tú quien me hizo enamorarme de ellos.

_____: yo lanzo mis flechas, pero... - no pudo decir nada más la ver como Jennie daba media vuelta, regresando a su lugar y volviendo a tomar asiento. -

CUPIDO: Un ángel diferente (Jennie & Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora