CUPIDO: Un ángel diferente (Jennie & Tú)

Capítulo veinticuatro: No lo quiero olvidar

Al despertar, Jennie se dio cuenta de que se encontraba en su recámara, estaba muy confundida, le dolía la cabeza, y entonces los recuerdos de aquella noche, de aquella pelea entre esos dos ángeles llegó a su memoria, y la imagen de _____ tirado entre sus brazos, con esa flecha negra clavada en su hombro, la hizo levantarse tan rápido que incluso se mareo un poco.

Se colocó unas pantuflas y salió corriendo rumbo a la sala, esperaba que todo hubiera sido solo una pesadilla, quería ver en el mismo sillón a _____ jugando con Kuma, verlo sonreír cuando sus miradas se encontraban. Necesitaba verlo ahí, tenía que verlo.

Pero al llegar a la sala, no había nadie, ni siquiera Kuma se encontraba cerca, hasta que escucho unos pasos justo detrás de ella.

Lisa: ¿qué haces levantada? Tienes que descansar.

Jennie: ¿Lisa? ¿qué haces aquí? – la miro muy confundida. -

Rosé: ¿te encuentras bien?

Jennie se dio cuenta de que sus tres amigas se encontraban en su departamento, y la miraban muy preocupadas.

Jennie: ¿dónde está Kuma?

Jisoo: se encuentra en mi casa, lo lleve porque estaba muy inquieto y preferí dejarlo con mi perro, así podría tranquilizarse.

Rosé: Jen ¿qué fue lo que sucedió? ¿dónde se encuentra _____?

Jennie: ¿cuánto tiempo llevo aquí? – se encontraba muy desorientada, quería recordar cómo es que sus amigas y ella habían llegado a su departamento. –

Lisa: una semana, has estado durmiendo por una semana, y con muchas pesadillas, estuviste con fiebre, ha estado aquí el médico, dijo que solo tenías que descansar y que todo estaría bien.

Jennie: ¿cómo es que llegue aquí?

Rosé: ese día, después de que saliéramos del restaurante en donde habíamos estado, tú y _____ se fueron, logramos escuchar algo sobre un "lugar especial", solo sonreímos cuando los escuchamos, supusimos que lo que querían era solamente estar juntos y a solas.

Lisa: pero pasaron las horas, y no sabíamos nada de ustedes, te estuvimos mandando mensajes y marcando muchísimas veces.

Jisoo: incluso tuvimos que venir a tu departamento, pero, el guardia nos comentó que no habías regresado, que de hecho tu auto seguía estacionado es su cajón.

Rosé: eso se nos hizo muy extraño, estuvimos manejando por toda la ciudad por horas, hasta que recordé ese parque, y ese enorme árbol, y la forma tan especial en la que _____ lo observaba aquel día mientras ustedes se encontraban hablando.

Lisa: así que, sin pensarlo dos veces, nos dirigimos ahí, pero, cuando llegamos, tú te encontrabas arrodillada en el piso, completamente desorientada, apenas y Rosie te pudo sujetar antes de que perdieras el conocimiento.

Jisoo: ¿qué fue lo que sucedió?

Jennie: él se fue... se lo han llevado.

Rosé: ¿cómo que se fue? ¿a dónde se fue?

Jennie: no lo sé... no sé a dónde se lo llevaron.

Lisa: ¿qué sucedió?

Entre lágrimas, Jennie comenzó a contarle a sus amigas todo lo que había sucedido esa noche, bueno, casi todo, no les menciono nada sobre la historia de ese ángel de la guarda que _____ le había contado antes.

Pero si les dijo que había aparecido un ángel negro, que completamente lleno de odio había comenzado una batalla con _____, la forma en la que él la había protegido con sus alas, como fue que se había interpuesto entre ella y esa flecha negra que le habían lanzado. Todas recordaban que _____ les había contado que esas flechas causaban odio entre los humanos, pero, no les había explicado lo que causaba en los ángeles.

Jennie: yo... yo le dije que lo amaba, fue entonces que, al parecer mis palabras, lograron que _____ pudiera derrotar a ese ángel negro, pero... me lo arrebataron, se lo llevaron y no tengo idea de si está vivo... o no, - cubrió su rostro con sus manos, y comenzó a llorar, - le dije que lo amaba... demasiado tarde.

Rosé: no es así, Jen, se lo has dicho en el momento indicado, eso fue lo que los salvo a los dos.

Lisa: es verdad, gracias a eso, tú estás aquí.

Jennie: pero ¿en dónde está él?

Jisoo: quizás, él regrese pronto.

Jennie: ¿y si ya no vuelve?

Rosé: no debes de pensar de esa forma, Jen, él... él seguramente está bien.

Jennie: pues entonces necesito que regrese, quiero que regrese.

Lisa: tal vez... solo tal vez, deberías de prepararte para lo que sea.

Jennie: ¿a qué te refieres?

Lisa: bueno, él dijo que estaba aquí para ayudarte a creer nuevamente en el amor.

Jisoo: es verdad, - dijo mientras sujetaba la mano de Jennie, - dijo que esa era su misión y que por eso lo habían enviado contigo.

Jennie: ¿qué es lo que me están tratando de decir?

Rosé: creo que a lo que ellas se refieren, es que quizás debas de prepararte para tal vez no volverlo a ver, ese ángel logro ayudarte, logro demostrarte que puedes volver a enamorarte, a no renunciar al amor.

Lisa: ahora, debes de aferrarte a ese amor que él ha hecho despertar en ti, a no dejarlo morir, a no cerrarte a las posibilidades.

Jennie: no... no voy a renuncia a él, no lo haré.

Jisoo: pero...

Jennie: he dicho que no, no voy a renunciar a mi amor por él ni voy a olvidar nada de lo que ha sucedido, no quiero volver a enamorarme de nadie, yo lo que quiero es que él regrese conmigo.

Rosé: pero, no sabemos cómo hacer que él vuelva.

Jennie: pues entonces lo voy a averiguar.

Lisa: ¿cómo?

Jennie: buscaré la forma, pero no me dejarán así, sin una respuesta, él dijo que había más ángeles caminando entre nosotros, no sé cómo, pero, encontraré a alguno, y me darán una respuesta, necesito una respuesta, saber en dónde está _____.

Jisoo: entonces, no hay más de que hablar, nosotras te vamos a ayudar, - Jennie la miro sorprendida, - así es mi querida Nini, te vamos a ayudar.

Lisa: ella tiene razón, vamos a hacer lo que sea para encontrar a un ángel y que responda a todas tus dudas, quizás si nos portamos muy mal venga alguno.

Rosé: ¿portarse mal? ¿más de lo que ya lo hacen? ¿eso es posible?

Jisoo: puede funcionar, piénsalo, podría aparecer un ángel.

Rosé: cuando dices "un ángel", te refieres a ¿uno bueno o uno malo?

Lisa: podría ser cualquiera, quizás uno bueno para pedirnos que nos comportemos...

Jisoo: o uno malo... para reclutarnos, el punto aquí es, que puede que funcione el plan.

Rosé: están más locas de lo que pensaba.

Jennie: gracias... - las tres giraron para mirarla. -

Jisoo: ¿por qué?

Jennie: por ser mis amigas, por estar conmigo, y por apoyarme en todo.

Lisa: te queremos mucho, somos como hermanas y nunca nos dejaremos solas, siempre estaremos aquí para ayudarnos, y protegernos.

Rosé: además... estoy segura de que tú harías lo mismo por nosotras, si fuera uno de nuestros ángeles quien estuviera en peligro.

Jisoo: entonces, andando chicas, tenemos un ángel que encontrar, pero ¿por dónde vamos a comenzar?

Jennie: por los lugares a donde él solía ir, hay personas a las que pienso seguir ayudando como lo hacía él.

Rosé: entonces, vamos a desayunar, para poder comenzar con nuestra misión, pero, primero tú, - le dijo a Jennie, - necesitas comer bien y una buena ducha.

Lisa: a la carga mis queridas amigas, tenemos trabajo por hacer y un ángel que encontrar.