CUPIDO: Un ángel diferente (Jennie & Tú)

Capítulo catorce: ¿Qué debo hacer? (Día siete)

_____ había regresado al cielo, pero no había ido a buscar a sus maestros, se había quedado apartado de todos, sentado mientras observaba a los humanos y a sus ángeles cuidándolos, por primera vez desde su existencia, no sabía qué hacer.

Miguel: está me parece que es la primera vez en cientos de años, que te veo aquí, sentado y sin hacer ruido, - le habló mientras aparecía a un lado de él. -

_____: creo que ya no me divierto tanto como antes.

Miguel: ¿qué es lo que sucede?

_____: ella hace muchas preguntas, y yo quiero darle todas las respuestas, pero, no puedo hacerlo.

Miguel: ¿esa es tu preocupación?

_____: no es solo esa, maestro, hay un ángel negro que está justamente detrás de ella, pero, no es cualquier ángel.

Miguel: ¿de quién se trata?

_____: está utilizando el nombre de Drazi, pero se trata de alguien más, se trata de alguien del pasado.

Miguel: te entiendo, y ahora más que nunca, no debes dejar sola a esa humana, sabes que debes hacerle volver a creer en el amor, no pierdas de vista tu misión, puedes responder a sus preguntas, pero no te es permitido mencionar nada de lo sucedido con esa flecha de odio que se te pidió utilizar en aquella ocasión, podría haber consecuencias si lo haces.

_____: ¿y si ella pregunta por ese ángel negro?

Miguel: puedes decirle que sucede con los ángeles negros y por qué algunos están tan interesados en los humanos, pero solamente eso.

_____: maestro ¿por qué? Dígame ¿por qué fue tan importante que usara esa flecha? ¿por qué me sentí tan diferente después de lanzarla?

Miguel: lo único que debes saber al respecto, es que fue necesario que lo hicieras, y no debes sentirte de esa manera extraña, hiciste lo correcto.

_____: no siento que haya hecho lo correcto, no me gusto para nada usar esa flecha, pude haber causado un caos por eso.

Miguel: por este motivo es que me preocupaba que pasarás tanto tiempo entre los humanos, comienzas a generar sentimientos que ningún otro ángel puede sentir.

_____: siento que seré castigado por mis actos.

Miguel: ¿castigado? Bien sabes que no será así, nuestro padre fue quien te hizo esa petición, así que no serás castigado por nada.

_____: no me refiero a ser castigado por nuestro padre... - habló al mismo tiempo que se levantaba y comenzaba a caminar hacia otra dirección, dándole la espalda a ese arcángel que se encontraba junto a él. -

Miguel: ¿entonces por quién? ¿qué es lo que realmente te sucede _____?

_____: cuando lancé esa flecha... yo lo vi, yo vi a Lucifer, él estaba en ese callejón esa noche, entre las sombras, solo lo pude ver por unos instantes... pero... él dijo algo, - le respondió al mismo tiempo que volteaba a verlo. -

Miguel: ¿qué fue lo que dijo?

_____: su mirada se encontró con la mía e hizo una pregunta, yo... lo había olvidado, después de tanto tiempo... pero, la recordé en cuanto miré a los ojos a ese ser oscuro que invadió el cuerpo de ese hombre... esa noche, mientras ese ángel de la guarda lloraba y abrazaba el cuerpo de su protegida después de haberla perdido, Lucifer me miró directo a los ojos y dijo "¿sabes qué es aún mejor para nosotros que ver como un ángel pierde a su protegido?" solo menciono eso y después desapareció.

Miguel: tú bien sabes que jamás debes de confiar y escuchar todo lo que digan esos seres, mucho menos si se trata de Lucifer, no dejes que esas palabras lleguen a crear confusión en ti, porque, de ser así, jamás podrás ayudar a esa humana, y ella se encontrará pérdida.