Capítulo seis: El primer día juntos (Día uno)

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Cuando terminaron su comida, se dirigieron a su oficina, aún tenían muchas cosas por hacer antes de poder irse a descansar, _____ se mantuvo al lado de Jennie, observando todo lo que hacía, tenía tantas preguntas que quería realizarle, pero, sabía que ella no le respondería, así que se mantuvo sentado en el sillón, observando todo en silenció, a veces se le iluminaba el rostro al ver algo que para él era extraño, pero su semblante cambiaba cuando se daba cuenta de que Jennie lo observaba.

Ella seguía con su trabajo, y en varias ocasiones su mirada se dirigía a ese ángel que estaba en su oficina, quería entender por qué la habían elegido a ella, para haberle mandado a ese ángel, no entendía eso, pero esperaba que, con el paso de los días, él le pudiera dar una respuesta a esas preguntas. Mientras tanto tendría que aprender a convivir con ese ser que estaba en su oficina. En realidad, al verlo detenidamente en la forma en la que se encontraba quieto y con la mirada hacía la pared, parecía un niño castigado.

Jennie: ya he terminado, ya nos podemos ir.

_____: por fin ¿A dónde iremos?

Jennie: a mi casa

_____: ¿a tu casa? Quieres decir qué ¿te encerrarás ahora en tu casa?

Jennie: así es, esté es mi estilo de vida, así que acostúmbrate a él.

_____: ¿podemos ir a caminar?

Jennie: no.

_____: ¿me llevas a conocer los lugares cercanos?

Jennie: estoy cansada.

_____: ¿podemos sacar a caminar a tu mascota?

Jennie: quiero descansar, no me gusta salir de casa tan seguido.

_____: antes sí te gustaba.

Jennie: tú lo has dicho, antes me gustaba, ahora ya no, así que vamos a mi casa, o si prefieres te puedes ir a otro lado.

_____: no me puedo ir a otro lado.

Jennie: ¿por qué no? Hoy desapareciste dos veces, así que puedes ir a donde quieras.

_____: me fui por qué tuve que utilizar mis flechas para...

Jennie: no lo quiero saber, ya te dije que no quiero saber nada que tenga que ver con tus flechas.

_____: lo siento.

Jennie: mejor ya vámonos, quiero descansar.

Los dos salieron de la agencia, obviamente él tuvo que desaparecer ante la vista de todos los demás, acompañó a Jennie a su auto y se subió junto con ella, permaneció en silencio en todo el camino, su mirada estaba fija en la ventanilla, observando todo a su alrededor. Jennie se pudo dar cuenta en más de una ocasión que a veces él sonreía cuando miraba algo en específico.

Cuando al fin llegaron a su destino y entraron al departamento, Kuma corrió para saludar primero a _____ y después a Jennie, esto le molesto, ya que su mascota por lo general no le agradaban los desconocidos, y ahora la estaba cambiando por uno.

Jennie: me iré a cambiar, - al comenzar a caminar, sintió como ese ángel la comenzó a seguir, - ¿qué rayos crees que haces?

_____: voy contigo, tengo que estar contigo.

Jennie: pero por supuesto que no, eres un pervertido, no puedes estar conmigo mientras me estoy cambiando.

_____: comienzo a pensar que eso de "pervertido" es una mala palabra.

Jennie: pues tienes toda la razón, hay tres cosas en las que tienes prohibido acercarte a mí, primera, cuando me vaya a cambiar de ropa, segundo cuando me vaya a bañar o utilizar el sanitario y tercera, cuando este durmiendo ¿entendiste?

CUPIDO: Un ángel diferente (Jennie & Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora