Leyendo Naruto DxD El dios de la locura, el caos y la destrucción

Capitulo 1

Rías se encontraba despertando en un lugar que no fue capaz de reconocer, se sentía algo somnolienta debido a que había había dormida bastante tiempo, ella no recordaba en qué momento se había dormido solo recordaba estar con Sona y sus dos noblezas en la reunión de jóvenes demonios antes de que fueran envueltos por una luz brillante y ahora despertaba acá.

Ella no entendía que pasaba pero al mirar a su alrededor pudo ver a varias personas despertando al igual que ella entre las cuales pudo ver a su hermano mayor Sirzech Lucifer, la Gremory se acercó corriendo a su hermano para preguntarle que estaba pasando, talvez el sabría.

-Onii-sama, sabes donde estamos?. La pelirroja preguntó a su hermano esperanzada solo para decepcionarse al verlo negar.

-La verdad no tengo ni la menor idea de donde estamos Rías, pero ten cuidado parece que no estamos solos. El satán carmesí dijo viendo a su alrededor a varios seres sobrenaturales que no eran demonios.

Varias personas más estaban en ese estado hasta que notaron algo, muchas de las personas que se suponían estaban muertas en sus mundos se encontraban en el mismo lugar.

Entre todos estos seres destacaban algunos como lo eran Elohim y los 4 maous originales que se suponía habían muerto durante la gran guerra, también estaban varios seres de gran poder entre estos estaban Ophis, Great Red, Triexa el cual estaba encadenado sin poder moverse o hacer algo, Acnalogia, Urano, Cronos, Caos, Orden y muchos más, esto sorprendió a todos los emisarios de sus respectivos mundos, especialmente a los de Percy Jackson y DxD al ver a los ya mencionados que se suponía estaban muertos.

Nadie decía nada todos desconfiaban de los demás ya que esto sin duda era poco usual, no todos los días los muertos eran traídos a la vida y mucho menos entidades que solo podían ser catalogadas con un nivel cosmico o universal.

Esto hizo que rápidamente el ambiente se tensara con todas las personas en la sala preparándose para la confrontación que parecía inminente.

Pero antes de que pudieran lanzarse los unos a los otros en combate una voz los hizo mirar a su alrededor sorprendidos.

-Veo que finalmente despiertan, por lo que veo están a punto de iniciar un combate, sin embargo les pediré que se calmen ya que ninguno de ustedes es el responsable de que esten en este lugar ya que fui yo quien los trajo. La voz resonó en toda las sala con todos preguntándose de donde provenía y por qué los había traído.

-Bien se preguntaran por que los traje aquí, la respuesta es simple, están aquí para leer sobre alguien, un ser de gran poder que logro poner su dimensión en un completo caos, alguien con poder para dejar a cualquier ser o entidad cósmica como un mero insecto a su lado, van a leer sobre Naruto Cipher el dios del caos, la locura y la destrucción, aquel que hizo que su mundo sufriera uno de los mayores genocidios del mundo y se coronó como el rey de este lugar.

Ante las palabras dichas por la misteriosa voz todos abrieron los ojos en shock por tal información, era aterrador pensar en alguien así, ellos no sabían que hacer hasta que en un fuerte brillo un libro grande con tapa negra apareció, el titulo estaba escrito en un amarillo fosforescente mientras en la portada se veía lo que parecía ser un triángulo con un ojo en el centro de color amarillo.

-Y si nos rehusamos?. Zeus de Percy Jackson hablo con enojo, no dejaría que nadie le dijera a el, él gran Zeus rey del olimpo que hacer.

-Me temo que es su única opción, por si no lo han notado acabo de bloquear la mayor parte de sus poderes por lo que no podrán salir hasta que hayan finalizado con la lectura, les deseo suerte y los estaré observando para que no hagan una idiotez.

Con eso dicho todos se quedaron en silencio viendo al libro, al menos fue así hasta que a paso lento Atenea de Percy Jackson se acercó al libro tomándolo en sus manos, tan pronto como la diosa lo abrió un gran brillo los cegó, la sala fue llenada de asientos bastante cómodos con comida, una gran pantalla se generó haciendo que todos se quedaran boquiabiertos.