Entrometido. | Minsung.

Capítulo 14.

AVISO: Capítulo Lemon. Hyunjin y Felix. :)

– Lindo, solo has tomado una copa y ya estás borracho, ¿puedo esperar algo más? – Dijo Hyunjin, quien solo estaba disfrutando de los besos en el cuello que le daba el menor.

– Cállate, no estoy borracho. – Habló Felix, mirando al otro chico con un poco de enojo en su cara.

– Si es así ¿haces esto por gusto? Ya no tienes excusa que era el alcohol. – Sonrió el mayor mientras tiraba su cabeza hacía atrás.

En eso el otro lo beso, acomodandose arriba de este.

– ¿Y si dejas de hablar y te monto?

– Me parece perfecto.

Felix no es que no quisiera hacer eso, pero su mente solo podía pensar en que el otro chico solo lo buscaba por interés. Por callar todo lo que sabía.

Y es que ese fue su pensamiento desde que este le envió cartas a través de Yeji, diciendole lo precioso que se veía.

Pero aun así estuviera seguro las palabras del chico eran dulces, mas de lo que quería.

Cartas que no tenían nombre, pero su autor era tan buen escritor que era fácil de diferenciar.

Felix se enamoró de esas cartas y había prometido chuparsela a ese dicho autor que aceleraba su corazón.

No quería creer que solo lo estaba utilizando.

Hyunjin con delicadeza retiró la camisa de Felix y empezó a lamer todo su cuerpo. Tenía al menor encima de su regazo e inmediatamente tomó el poder tocó todo el cuerpo que el otro le permitía.

Lo hacía a conciencia, grabando cada curva, parte o lugar de este.

Con su lengua se fijó en el cuello del otro, dejando las mismas marcas que ahora tenía en su cuello.

Probó y saboreó su piel a gusto, sintiendo su miembro a punto de levantarse y al otro jadear.

Y es que con aquella posición su miembro encajaba perfectamente en el trasero del menor, excitado aun más con esto.

No podía con más, levantó al otro para sacarle el pantalón suavemente, sin antes dedicarle una mirada esperando autorización.

Sacó el suyo y giró a felix para empezar a prepararlo.

Se levantó un poco y buscó en su auto un condón y un lubricante.

Este último lo regó en sus manos, entrando lo más delicadamente en el menor, moviendo el único dedo que había metido.

Llegó a meter sus dos dedos y moverlos lentamente hasta que los gemidos de dolor disminuyeron, Hyun ya no tenía que aguantar sus ganas de entrar.

Se acomodó bien, golpeando un poco su cabeza con el techo del auto y entró lentamente, los gemidos de Felix no se hicieron esperar.

Entre más gemidos mas fuerte lo hacía Hyunjin, quien había acomodado a Felix para su espalda estuviera contra su pecho.

Felix no paraba de gemir pero también tenía miedo que los vieran, así que lo hacía lo más suave posible.

También mordía sus labios para evitar hacerlo, acto que, cuando Hyunjin se dió cuenta lo besó por un largo tiempo.

No quería que este se hiciera daño.

Al venirse los dos sus respiraciones seguían agitadas. Hyunjin dejó que Felix se acostara en su pecho mientras se calmaba.

Y en eso, Hyun se cambió y salió del auto, yendo al asiento delantero y encendiendo el auto.

– Felix, precioso, si quieres te puedes quedar desnudo pero si la policía te ve así no creo que le guste. – Bromeó Hyunjin, saliendo del parqueadero.

– ¿A donde me llevas? – Preguntó el menor, colocandose ropa.

– A un lugar a donde dormir, está muy tarde para que llegues a tu casa. Si quieres le hablo a tu madre por ti.

– ¿Me vas a dejar solo en un hotel? – Su mirada se veía triste.

Ya lo iba a dejar.

– Obvio no, voy a dormir contigo.

Felix se levantó para besar la mejilla del otro, recibiendo una sonrisa.