Alma perdida

Capítulo 15

Hola a todos, este capítulo lo escribí luego del capítulo de anoche. Dios mío quedé impactada y medio asqueada xD 

Solo tengo algo que decir: ¡¡¡¡¡¡¡VERDES malditos!!!!!!!

Impactada con el capítulo de anoche, y la escena de los pies jajaja. No era tan decente como decía perralicent. 

Acá hay algunas menciones a eso, porque si o si tenía que incluirlo, no podía dejar pasar eso jaja. 

Les dejo el capítulo, gracias a todos los que leen y comentan, realmente me hace muy feliz leer sus comentarios.

PD: No encontré portada buena, así que les dejo un meme 😏😏

Besos y abrazos. XOXO

Durante la cena de esa noche, la tensión en la mesa era evidente.

El rey Viserys había tenido la idea de que todos se reunieran a cenar, y todos habían obedecido su llamado. 

Alicent miraba de forma prepotente a Rhaenyra que parecía nerviosa, y Alicent pensaba que ella estaba así porque para nadie era ajeno el mal humor del príncipe Daemon y Alicent suponía que ese mal humor se debía a la presencia de Laenor Velaryon allí, el que en los últimos días se susurraba era o el amante o compañero de promiscua diversión de la princesa. 

Alicent no podía saber que el mal humor del príncipe no era con su esposa, sino precisamente contra ella. Daemon estaba en una batalla interna sobre si matar a la reina en la cena y adornar la mesa con su cabeza, o esperar como Rhaenyra le había pedido.

Daemon se puso de pie bruscamente cuando no pudo soportar más la situación, necesitaba salir de allí. Laenor que también estaba allí se puso de pie para seguirlo, pero Rhaenyra tomó la mano de Daemon y lo miró a los ojos.

- Por favor- pidió ella sabiendo que ahora eran el centro de atención.

- Como mi esposa desee- dijo él tomando otra copa de vino.

Laenor miró a su prima y ella asintió, él volvió a tomar asiento y Rhaenyra estaba de sobra consciente de que todos pensaban que el conflicto era entre Laenor, Daemon y ella. Incluso la princesa Rhaenys parecía nerviosa con ese conflicto y Corlys miraba confundido a su hijo.

Lord Corlys creía conocer a su hijo tan bien como Rhaenys, ellos miraban la tensión entre Laenor, Rhaenyra y Daemon, repasaban en sus mentes el escándalo del día anterior, los rumores sobre Laenor y Rahenyra, y no comprendían como habían llegado a ese punto. ¿No se suponía que los gustos de su hijo eran diferentes? ¿O es que acaso Corlys había tenido razón y Laenor no había sido capaz de resistirse a Rhaenyra ''la delicia del reino''?

El rey miraba lo que sucedía, y no entendía absolutamente nada. 

Estaba molesto con Rhaenyra por el escándalo y los rumores que se habían esparcido, pero no le diría absolutamente nada porque ella no lo estaba pasando bien. Ella era libre de ser feliz luego de lo que había vivido.

Viserys miraba a Daemon y no comprendía si lo que tenía a su hermano molesto eran los rumores que se habían esparcido, o algo más. Daemon era un misterio, al igual que Laenor y Rhaenyra, saber que pensaban esos tres, siempre había sido complicado.

- Me gustaría hacer un brindis- dijo la reina Alicent y Viserys la miró extrañado ¿Un brindis?

Ella se puso de pie y todos la miraron con atención.

- Me gustaría hacer un brindis, por mi hijastra Rhaenyra y su esposo el príncipe Daemon, deseo que pronto puedan tener la felicidad que Viserys y yo compartimos, y los dioses los bendigan con un hijo- dijo ella y el rey sonrió. Nada le haría más feliz que tener un nieto.