Hijo de un Lord

La reunión

"¿Qué vas a hacer, Dumbledore?" preguntó Harry mientras bajaban las escaleras, "¿Enviarme a Azkaban? ¿Matarme?"

Dumbledore rió tranquilamente, "Oh no, Harry, nosotros no te mataremos."

Harry puso los ojos en blanco. Era el hijo del Señor Tenebroso, un asesino. Cualquiera con algo de sentido común lo mataría. Llegaron al final de las escaleras y entraron en la cocina. Dumbledore se detuvo en seco cuando Harry puso sus ojos en un niño. Era más joven que Harry, su cabello era castaño claro. Tenían la misma nariz.

"Theo," dijo Dumbledore, "¿Qué estás haciendo aquí?"

Así que este era el hijo de Potter.

Theo levantó la vista desde donde estaba sentado en la parte superior de la encimera, con las manos en el cabello con un aspecto increíblemente aburrido. Sus ojos se abrieron cuando se posaron en Harry, una sonrisa creció en su rostro.

"¿Quién es él?" pregunto.

Harry lo fulminó con la mirada y su rostro cayó un poco.

"Él es Harry," dijo Dumbledore, "Se unirá a nosotros para la reunión de esta noche."

Extraño. Muy extraño. Así que los Potter no le habían dicho al querido pequeño Theo sobre Harry. Qué curioso.

Theo se cayó, "Por eso no se me permite entrar allí. ¿Puedo subir ahora?"

Dumbledore asintió y Theo pasó corriendo junto a ellos, lanzando una mirada a Harry antes de desaparecer escaleras arriba.

Harry tarareó, viéndolo irse, "Mi hermano."

Dumbledore rio tranquilamente y asintió, "En efecto. Asumo-"

"Mi padre me contó sobre él. Aunque veo que Potter se olvidó de informarle sobre mí."

Dumbledore miró a Harry con algo que parecía lástima. "Tom no es tu padre, Harry. James lo es."

Harry sonrió, "La sangre del Señor Tenebroso corre por mis venas, viejo, ni siquiera tú puedes negarlo."

Harry odiaba lo triste que se veía Dumbledore en ese momento, ¡no necesitaba simpatía! ¡Necesitaba volver con su padre!

Dumbledore no dijo nada cuando entraron al comedor, todo el lugar se quedó en silencio en un instante.

La habitación era pequeña y pintoresca, pensó Harry con el ceño fruncido, nada como el gran comedor de la mansión Riddle pero, de nuevo, no todos pueden ser señores tenebrosos, ¿verdad? Todos los ojos estaban puestos en él, abiertos y sin pestañear. Sabía que estaban escudriñando su rostro, comparándolo con James, quien estaba sentado junto a Lily en el otro extremo de la mesa. Comparándolo con Voldemort, cuya cara estaba en El Profeta en el medio de la mesa.

Harry sabía quién era cada quien claro, su padre lo había educado bien en los miembros de la Orden del Fénix.

"Buenas noches a todos," dijo Dumbledore amablemente, "Este es Harry."

Harry podría haberse reído de la mirada en algunas caras. Las personas que no lo conocían miraban a Harry en estado de shock y las personas que lo conocían solo parecían exhaustas.

Lily hizo un pequeño sonido y Harry miró hacia ella. Ella le sonreía, sus ojos deslumbraban y brillaban con esperanza. Harry sonrió, apartando la mirada deseando aplastarlo. Para su sorpresa, Lily se levantó de su silla y caminó hacia él. Harry era más alto que ella así que solo le llegaba a la barbilla.

"Harry," susurro ella, extendiendo la mano para tocar su rostro.

Harry retrocedió, sabiendo que si intentaba agarrarla del brazo estaría peleando contra toda la Orden.