"Extraño matar personas."

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La sala común de Slytherin era cálida, sorprendentemente.

Una gran habitación teñida de verde desde las ventanas que mostraban un vistazo del lago debajo del cual estaban. Un parpadeo naranja iluminó parte de la habitación, el crepitar de un gran fuego se mezcló con el silencioso chapoteo del agua para crear un ambiente tranquilo. Tan pronto como Harry entró después de decir la contraseña (Pureza), se sintió instantáneamente como en casa, y parte de la nostalgia en la que se había estado revolcando se desvaneció.

Eran un grupo extraño, Harry tenía que admitir.

Draco lo miraba con sus ojos grises, un poco inseguro pero fingiendo confianza, la luz del fuego rebotaba en su cabello.

Ahí estaban los dos chicos matones, Vincent y Greg, si Harry recordaba. No había mucho detrás de sus ojos, no muchos pensamientos en su cabeza. Sonrió levemente, pensando en lo predecible que era Draco teniendo 'guardaespaldas'.

La chica, Pansy, lo miró con una sonrisa fría. Parecería completamente tranquila si no fuera porque su pie rebotaba ansiosamente arriba y abajo.

El chico italiano, Blaise, miró a Harry con humor en sus ojos oscuros, era el tipo de persona que estaba constantemente al borde de la risa, se le podía ver en la boca, en el rabillo del ojo.

Y el chico Nott, Theo, estaba sentado en el borde de su asiento, como un pájaro listo para emprender el vuelo en el segundo que el peligro se sienta. Quizás influenciado por el padre del niño.

Pasaron unos momentos más de silencio antes de que Harry hablara.

"El nombre de mi padre es Tom Riddle."

No hubo reacción aparte de rostros confundidos y ceños fruncidos. Draco, por supuesto, solo le sonrió a sabiendas a Harry.

"Todos lo conocen como Lord Voldemort."

De inmediato, jadeos llenaron la habitación. La sonrisa de Pansy no vaciló ni un poco, en todo caso se hizo más grande. Theo miraba a Harry con horror.

"¿Por qué están todos tan sorprendidos? Les dije en el carruaje," dijo Draco, exasperado.

Blaise rió nerviosamente, "Tú, Draco Malfoy, eres un sucio mentiroso en el mejor de los momentos."

Draco se burló, "Cierra la boca, Zabini."

"Luces como él."

El silencio cayó ante la pequeña voz. Theo estaba mirando a Harry como si fuera un fantasma, verdadero miedo en sus ojos.

"¿Qué estás murmurando, Theo?" espetó Pansy, "Habla alto por el amor de Merlín."

Theo se aclaró la garganta, sus ojos nunca dejando los de Harry, "Dije que te pareces a él. Sus caras son tan similares."

"¿Has visto al Señor Tenebroso?" preguntó Harry en voz baja.

Theo asintió, "Solo un par de veces, cuando viene a ver a mi padre."

Harry asintió lentamente, "Fue adopción de sangre."

Draco inhaló bruscamente, obviamente no esperando que Harry fuera tan honesto.

"Entonces, ¿realmente eres un Potter?" preguntó Pansy con sarcasmo, "No eres realmente su hijo en absoluto, ¿verdad?"

Harry miró a la confiada chica por un momento, observando cómo su expresión se transformaba de una mueca de superioridad a inquietud.

"Draco," dijo Harry, "Dame tu varita."

Draco arrojó su varita sin pensarlo, Harry la atrapó sin problemas. El chico de cabello oscuro giró la varita en sus dedos por un momento, la habitación estaba inquietantemente silenciosa. Después de un momento, se levantó con gracia de su asiento y caminó lentamente hacia Pansy, su paso como el de un gato o una serpiente.

Hijo de un LordDonde viven las historias. Descúbrelo ahora