Especial MacaoXChay (parte II)

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Quién me iba a decir a mí, que ibas a llegar a mi corazón entrando por la boca.

Conviertes las mil maneras que existen de huir en mil maneras de quedarse,
contigo. Y dormir a tu lado
se convierte, entonces, en poesía.

Elvira Sastre. -Y dormir contigo se convierte, entonces, en poesía-

MACAO:

-El cielo hoy está especialmente hermoso - La dulce voz que provenía del ser que estaba recostado a mi lado se escuchó irrumpiendo el silencio de la noche. -Las estrellas parecen brillar mucho.

Estábamos en la terraza, sobre unas mullidas colchas, almohadones, alumbrado con pequeñas velas falsas.

-No es tan hermoso como tú, ni las estrellas brillan tanto como tus ojos y tu sonrisa. - Chay me miró, note un pequeño sonrojo en sus mejillas morenas. - Espero que te haya gustado está cita. De seguro tendremos más en el futuro.

-Las tendremos, es por eso que decidí cambiar de idea sobre la universidad. - se volteo hacia mi, quedamos viéndonos frente a frente, nuestras manos estaban entrelazadas.

- Chay se que es demasiado pronto quizá. Pero llevo queriendo preguntar esto desde hace unos meses. - me senté, me había preparado mentalmente para este momento. Chay me vio con una gran interrogante en su cara pero me prestó atención en todo momento.

-Dime...- No soltó mi mano, al contrario me acaricio el dorso con su pulgar.

-¿Te gustaría ser mi novio? - Jamás había tenido novio- novia. Algunas veces salí con chicas lindas omegas. Pero ninguna me gustaba del todo.
Se me quedó viendo a los ojos sin ninguna expresión, después de varios torturosos segundos río, agachó su mirada y después la volvió a levantar, note unas pequeñas lágrimas.

-Macao, me encantaría ser tu novio - soltó mi mano y me abrazo sorprendiendome- si quiero, si quiero ser tu novio -Me tiro besándome, quedó encima de mi, solo atiné a sonreír y corresponder su beso. - creí que jamás lo preguntarías - se separó, quedamos viéndonos.

- ¿Cómo no preguntarlo? Siento que te quiero desde siempre - en un movimiento quedé yo arriba sobre el aún quedando sobre las colchas y cobijas. - Te amo Porchay - bese su frente, sus mejillas, nariz, labios, después me pase a su cuello.

-mmm- note la voz entrecortada de chay al ver su rostro note que estaba rojo- me gustó que me besaras así - admitio con una ternura y vergüenza adorable.

-¿Aquí? - sonreí de forma juguetona, volviendo a pasar mis labios por su cuello-

-Si..- ya nos habíamos acariciado antes, pero los besos solo eran en la boca. Esta vez regrese a sus labios, metí mi lengua acariciando sus labios moviendo mi boca a un ritmo despacio y sensual saboreandolo. Cole una mano por su camisa, acaricie su costado izquierdo - ahh... - un pequeño gemido salió de sus dulces labios contra mi boca, sin querer pase mi mano por su pezon y mi entrepierna se rozo con la suya, dejándonos sentir que ambos estábamos duros. Y a no ser por ese dulce aroma de vainilla que empezaba a ser un poco intenso, significaba que a ambos nos gustaba, nos necesitábamos con urgencia.

-Eres tan hermoso - volví a besar sus labios y morder ligeramente el labio inferior.

-Macao... Estoy listo para el siguiente paso - Me hablo con voz tímida pero firme.

- Dimelo Chay... - besé su mentón, depues nos miramos fijamente.

-Quiero que hagamos el amor - después de varios minutos estáticos, se cubrió el rostro y después dijo- Está bien si tú no quieres, lo siento no quise sonar desesperado. Emm...

Solo para mí. [COMPLETA]✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora