Capítulo 18

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Vegas se fue en la mañana. Se despidió de pete con la promesa de que al regresar encontraría a alguien diferente. Trabajaría en si mismo, en su actitud y todo lo que estaba mal en el.

Pete por otro lado, le dolió la partida de Vegas. Supo que al igual que él, Vegas también se sentía y estaba solo. No se daba la oportunidad de quererse, escondiendo sus  sentimientos a todos. Eso no les favorecía si decidían tener una relación.
Así que ambos se prometieron sanar en la distancia.

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Pete, estaba logrando volver  a si mismo, no tuvo otro ciclo de calor. Vegas lo sacio bastante bien en su estadía. Si, extrañaba su presencia y aroma, su tacto y sus besos. A veces se dormía en su nido, usando la ropa de Vegas.

Macao y Venice se quedaron con él  en  su casa, poco a poco la sonrisa perdida de pete volvía a relucir.
Se encargaba de ir a la cosecha, llevando consigo a los niños. Les gustó recolectar frutas, era una actividad meramente terapéutica y por las tardes iban a casa de sus abuelos a comer y tomar el té, después en la puesta del sol los tres jugaban en la orilla de la playa.
Se divertía viendo a Venice el mar con curiosidad y temor.   Macao y Venice hacían castillos de arena  y Pete disfrutaba ver a esos niños que amaba con todo el corazón ser felices.

Se sentaron los 3 a la orilla de la playa viendo la puesta de sol. Venice  ya quería caminar así que daba pequeños pasos con ayuda de Pete y Macao.
Pete dejaba que los piecitos de Venice se mojaran se divertía sacudiendose la arena de los pies.

Se retiraban de la playa cuando el pequeño de los 3 comenzaba a bostezar y a pedir a Pete que lo sostuviera en sus brazos a modo  de pequeños lloriqueos y berrinches.

Lo llevaba hacia adentro le daba un baño calientito.
Pete sabía demasiado bien como calmarlo, cuando el llanto comenzaba a hacerse más escandaloso.  Solo le alzaba  en sus brazos y comenzaba a meserlo suavemente, le daba  el biberón para que el pequeño niño cerrara sus ojos de a poco hasta caer profundamente dormido. Le acostaba en su cama haciendo murallas con las almohadas para que esté no se cayera.
Besaba sus cabellos negros y le arropaba, dejando una pequeña luz encendida.

ƥ

Macao  le había hecho una videollamada con Porche, Thankuun, Chay, Pol, Arm y Tay.
Sabía que les extrañaba demasiado, así que esa videollamada bastó para alegrar aún más el día de Pete.
Se puso al día con los chismes que le tenía preparado Thankuun.
Porche le presento al pequeño Phoenix Terapanyakuul (Finix-Fenix). Tenía la tez de porche pero la cara igual a Kinn.

A Tay se le notaba ya su embarazo,  le contó que esperaba gemelos ambos niños. Time  se desmayó cuando lo supó.
Eso hizo reír a pete y a la mayoría.
Arm y Pol seguían siendo guardaespaldas y en sus días libres, salían a citas. Querían ir despacio.
Después Chay le dijo que estaba buscando un traje para la  graduación.

Se alegro tanto de ver a sus amigos.  Los había extrañado mucho. Y se sintió muy feliz al saber que  ellos también a él.

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1 MES DESPUÉS:

- Mamá, en dos semanas tendremos que irnos ¿Vendrás con nosotros? - Era una tarde hermosa de sábado, ese día no tuvo que ir al campo de cosecha, Venice tomaba su siesta, Pete leía un libro que antes le pertenecía a Vegas. Macao acababa de salir de su sesión con la psicóloga.

En todo este tiempo Macao estuvo controlado con la psicóloga y psiquiatra, sin abandonar su medicamento.  Ahora que estaba en la isla, tomaba sus terapias vía online.

- No lo sé Macao, no tengo a dónde llegar y las rentas en Bangok son muy caras - dejo su libro tomando un suspiro mirando hacia Macao. Su rostro se decayó un poco.

Solo para mí. [COMPLETA]✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora