𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 5

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𝐄𝐋 𝐑𝐔𝐈𝐒𝐄Ñ𝐎𝐑 𝐃𝐄𝐋 𝐄𝐌𝐏𝐄𝐑𝐀𝐃𝐎𝐑

━━━❝𝙋𝙖𝙡𝙖𝙗𝙧𝙖𝙨 𝙣𝙤 𝙫𝙖𝙘𝙞𝙖𝙨❞━━━

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El festival de la flor ardiente”

Es una tradición que es un Izuku luego del no encuentro con el emperador en aquel hermoso jardín que había resplandecido por minutos con la música que escapaba de la flauta a manos de Tamaki y que hacía juego precisamente con la suavidad y habilidosa delicadeza con los pasos de Toga, Hagakure y Nejire que le habían dado a sus ojos la muestra de su danza de abertura para el festival.

Un festival que nacía con el propósito de unir corazón, además de descubrir mucho más de lo que creía y leía de los libros que le eran prestados para entretenerse; mismos libros que ocupaba para enriquecerse y saciar la curiosidad latente que rodeaba su instinto como... ¿Omega? O lo que fuera que se identificará su segundo género, porque en este punto eso seguía en duda ahora y más con la confianza siempre del doctor real sobre que sin duda, había sido un Gamma criado como Omega.

Pero eso sería otro de sus problemas menores, ahora solo estaba con la emoción en su rostro como si de un infante se tratará.

El descubrir que el festival de la flor ardiente une a cada habitante del imperio bajo el yugo del único Delta de toda el continente, nación e imperio, y su nombre era digno de temer aún cuando no conocieras el rostro del emperador de Callum, Bakugou Katsuki.

Midoriya se enteró que el nacimiento del festival salió a luz como tradición a la primera presentación del emperador cuando apenas era un niño y misma presentación de su segundo género que los guío a la prosperidad. En vez de manchar la tradición con la sangre de sus antepasados, quisieron respetarlos y honrarlos con algo más maravilloso; aquellos que le habían inculcado la apreciación de los Omegas y Gammas.

El festival, es la unión de los jóvenes que quieran iniciar sus días de cortejos, siendo una nación en que nace solo 80 omegas al año; y siendo la mayoría betas y Alfas, querían mantener lo candente de lo que Callum y el respeto que nació con ellos. El festival de cortejo que sucedía para todas las edades, que iniciaba con los más jóvenes y recién presentados con su segundo género hasta los más ancianos que sin quedaban y deseaban volver a sentir en sus corazones, pieles e instinto el tener un compañero.

Era un festival colorido, bullicioso y lleno de música, podían participar todos y las actividades eran más para gozar entre todos un momento como uno solo. Porque todos eran una manada, por más que el imperio se extendiera por hectáreas y ya no fuera la maravilla que era antes, seguían siendo eso.

Una manada.

Así que, el festival de la flor ardiente se unían betas y Alfas, así como los pocos Omegas en sus filas que eran tratados con sumo cuidado pero no quitándole sus derechos de elección; después de todo, cada habitante de Callum conocía a la perfección y crecía ciegamente en que los destinados podían aparecer y suceder, esa unión mágica predispuesta por los dioses debían ser dejada ser.

𝐄𝐋 𝐑𝐔𝐈𝐒𝐄Ñ𝐎𝐑 𝐃𝐄𝐋 𝐄𝐌𝐏𝐄𝐑𝐀𝐃𝐎𝐑 •| #KatsuDekuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora