bad boy ─ minjin

O33.

maratón 2/2

El pelirrojo apunto hacia el tablero de práctica frente a el, presionó su dedo contra el gatillo haciendo que un sonido hueco se escuchará en todo el lugar provocando que los que no tuviesen colocado el material necesario, sintieran los bellos de su piel erisarse.

Un disparo perfecto, eso había sido. Y es que no se podía esperar otra cosa del líder del escuadrón de francotiradores. Mark se hizo a un lado el arma para soltar un pequeño suspiro, los aplausos provenientes de su derecha lo hicieron girar su cabeza violentamente hacia esa dirección.

── Increíble── el hombre sonrió con sinceridad al francotirador delante de él.

──Muchas gracias señor HyunWoo──. Tuan hizo una pequeña reverencia en señal de respeto, esperando la orden de su superior para levantarse. El hombre tomo los hombros del chico obligándolo a levantarse mientras negaba con la cabeza dándole a entender que no era necesaria tanta formalidad.

Mark se irguió como era debido, siguió a su superior con la mirada pues este camino un poco para quedar frente a frente del tablero de práctica en el que anteriormente el pelirrojo había disparado. Tomo un arma adoptando la postura correcta mirando con confusión todo lo que el hombre hacia.

──Debes prepararte Mark──. Subió un poco más el arma ── los tiempos que vienen, no parecen ser fáciles.

Dicho esto disparo, exactamente en el mismo punto que el pelirrojo.

La máscara le causaba comezón, pero era más que claro el efecto que tendría en su piel al ser un material que nunca antes había usado. Se sentía patético, no, era patético. Había abandonado a quienes le habían brindado un hogar, solo por ser débil y no saber interponerse ante esa debilidad.

YoonGi le hizo una seña para que le siguiera, Seungmin luego de dar un enorme suspiro lo hizo. Ambos chicos entraron a una pequeña casa de la cual el menor desconocía, pues el apellido Lee en la puerta, no había pasado desapercibido ante sus ojos.

── ¿Donde estamos?── preguntó mirando a sus alrededores.

── Durante un tiempo, Minho vivió aquí con el jefe. Fue antes de que la madre de Minho muriera.

── Ya veo── murmuró sin saber que decir mucho menos que movimientos hacer. Mordió su mejilla interna, se sentía incómodo llamándole jefe a alguien que no fuese Minho.

Pero esperaba que este lo entendiera, que entendiera lo que hacía. Solo esperaba que no lo juzgarán sin no haber conocido antes sus razones.

Una sombra se dejó ver a medida iban avanzando por aquellas escaleras, apoyado contra una de las paredes, Kim abrió sus ojos de par en par.

── Felix... Tú... ¿Qué haces aquí?

Jisung suspiro con gran aburrimiento, el maratón de películas de Netflix no le había entretenido en absoluto. Se sentía con unas enormes ganas de salir de aquella asfixiante casa, sin embargo, sabía que si hacia eso corría más peligro del que Minho lo hacía.

La puerta siendo tirada hizo que el de apellido Han diera un salto sobre el sofá. Minho y Hyunjin bajaron rápidamente las escaleras, ambos con pijamas de animalitos puestas -a petición del de hebras rubias-.

Changbin y Chris estaban empapados por la lluvia. SeeIn sostenía a Bang para que esté no se cayera mientras JeongIn le rogaba volver al hospital. El aura que rodeaba a Seo y a Bang eran tan oscura que incluso se sentían las malas vibras en el aire.

──¿Qué ha pasado?── preguntó Lee acercándose hasta ellos.

── Chris hyung ya no quiere volver a el hospital porque Seungmin hyung termino con él. Lo he intentado convencer pero no me escucha── JeongIn hizo un puchero.

── Changbin fue dejado por Felix también hoy, ¿Es el día perfecto para romper corazones o qué?── SeeIn frunció su ceño.

──Bang, debes volver a el hospital── Minho ordenó duramente.

──Ni lo pienses── su voz ronca indicaba que nunca cambiaría de opinión ni aunque muriese ── lo siento jefe, pero esta vez no te obedecere.

Minho suspiro, le hizo una seña a JeongIn indicándole que se encargará de los cuidados del rubio, este pareció entenderlo y guió a Bang hasta las habitaciones de arriba donde le darían el tratamiento necesario para que Chris se recuperase.

Changbin se quedó en la puerta, quieto. Como si su mente se encontrase en otra dimensión. Miró a Minho y se acercó hasta el.

── Minho, tú...── guardo silencio unos segundos -──no puedes estar con Hyunjin.