O29.

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Se formó un pequeño silencio entre ambos chicos, el de cabello rubio tenía sus mejillas coloreadas de rosa mientras que Minho lo miraba con una sonrisa en su rostro.

Le gustaba poner al menor nervioso, probablemente estaba empezando a perder el control de sus emociones e incluso de sí mismo pero eso no era algo de lo que se preocupara. Había comenzado a aceptar sus sentimientos hacia el rubio, a su vez, aceptaba hacer lo que su corazón le mandara.

── Minho-ssi──murmuró el menor ── y--...── no termino de hablar debido a que el mayor había juntado sus labios en un suave y delicado toque. Casi inocente.

Hyunjin cerró sus ojos pasando sus manos por el cuello del contrario. Minho colocó sus manos en la delgada cintura del menor, elevándolo un poco haciendo un poco de fricción entre sus cuerpos que provocaban cosquilleos en el menor.

Una mano intrusa hizo su aparición por la espalda de Hyunjin, acariciando su suave piel y haciendo que el menor soltara suaves jadeos que quedaban sobre la boca de Lee, pues este no estaba dispuesto a separar sus labios.

El beso tenía un sabor dulce, combinado con el metal del piercing que Minho tenía en su labio, cuando el mayor comenzó a mover sus belfos contra los ajenos, una corriente eléctrica recorrió el cuerpo de ambos provocándoles escalofríos y una extraña sensación de necesidad, una necesidad que implicaba mucho más que un simple beso.

Minho introdujo su lengua en la boca de Hyunjin, explorando su cavidad bucal sin dejar ni un solo rincón libre. Un gemido salió del rubio, el mayor solo sintió su ser encenderse aún más ante esto, como pudo -porque ni el mismo sabe cómo- elevó a Hyunjin, quien enrollo sus piernas sobre las caderas del mayor, siendo aprisionado contra la pared más cercana de aquel solitario callejón.

Se separó de sus labios, observando una imagen tan hermosa de la cual el era el causante. Los labios de su pequeño abultados, habían adquirido un tono rosado, su respiración agitada y pequeñas gotas de sudor que caían sobre su frente.

¡Joder!

Eso solo lo encendía más.

Lo incitaba a continuar.

Hyunjin cerró sus ojos cuando el mayor se acercó a su rostro con la intención de besarlo nuevamente. Pero las voz de cierto chico los detuvo.

──Minho── SeeIn habló claramente molestó ──vámonos.

El mencionado se dió la vuelta dejando libre a Hyunjin, quien miró al nuevo chico con curiosidad, pues este no traía máscara como lo acostumbraban a hacer.

── Kang ¿Qué h--...──el mayor lo interrumpió.

── ¡Solo camina, maldita sea!── gritó.

El pelinegro lo miró extrañado, pero obedeció, y tomando la mano del de pecas comenzó a caminar fuera del callejón. Kang elevó su mirada hacia uno de los edificios, el punto rojo se colocó sobre su pecho.

HyunWoo, el padre de Minho sonrió.

── Nada mal SeeIn── dijo mientras se alejaba.

── Nada mal SeeIn── dijo mientras se alejaba

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bad boy ─ minjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora