Capítulo 12 - Conciliación

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Reynare POV

Raynare nació siendo un ángel caído en el seno de la ciudad de su raza, Fallen City. Sus padres la educaron con todo el amor que pudieron antes de perder la vida en una de las tantas escaramuzas contra los demonios. Desde ese día la pequeña Raynare creció con un profundo rencor hacia esa facción que le arrebató lo más preciado para ella. 

Afortunadamente no estaba sola, uno de los gobernadores la tomo bajo su ala al notar su gran potencial y determinación, el gobernador general Azazel. Con el pasar de los años, el fuego de la venganza en Raynare fue disminuyendo gracias a las enseñanzas de su padrastro. Ella comprendió que había miles de niños al igual que ella, una víctima mas de la guerra entre facciones y gracias a eso; comprendió la importancia de lograr la paz entre facciones.

Sus victorias en las misiones que se le asignaban le dieron la suficiente confianza en los líderes como para ascenderla a líder de su propio escuadrón de vigilancia junto a una misión de suma importancia: vigilar y de ser posible reclutar a usuarios de Sacred Gear para los Gregori. Raynare no podía estar más contenta por ello y la aceptó gustosa. Al principio la misión fue sencilla pero entonces las cosas cambiaron cuando tuvo que hacer su reporte con uno de los lideres, Kokabiel. 

Kokabiel no solo era uno de los lideres de los ángeles caídos sino que también fue uno de los elementos más mortíferos de la antigua guerra. Sus diez pares de alas no eran de adorno después de todo, pero a diferencia de Azazel, este tenia un fuerte rencor contra las facciones por todo lo que perdieron; siempre profetizando la inminente amenaza que cualquier individuo significaba en el campo de batalla.

Raynare nunca hizo caso a las palabras de Kokabiel, pero una parte de ella no podía evitar sentir que ese caído tenia razón. ¿Cuánto tardará en emerger la próxima gran guerra? ¿Cuántos de los suyos morirían esta vez? Esos pensamientos infectaron su mente como un virus y lamentablemente para todos sacaron a relucir lo peor de ella. 

Ella desobedeció sus ordenes de observación y pasó a un ataque contra uno de sus objetivos: Issei Hyodo.

Raynare pensaba que estaba haciendo lo correcto, a pesar de sentir arrepentimiento contra las enseñanzas de su padrastro. Pero entonces todo salió mal, uno de sus subordinados confirmo que su objetivo había sido resucitado como demonio lo cual provocó pánico en ella al haberles entregado un elemento a la facción de los demonios. Ahora no tenían más opción que matarlo... Pero entonces él apareció, ese humano de cabello azabache con su poder de luz anormal.

Un simple humano los había derrotado completamente y casi los asesina, pero por alguna razón no lo hizo, sino que los entregó a los demonios para que fueran devueltos a su ciudad. Una vez regresaron, Azazel casi los hace cenizas por haberlo desobedecido y les otorgó otra oportunidad solo si esta vez seguían al pie de la letra la misión. Raynare aceptó la nueva oportunidad junto a su compañera Kalawarner, sin embargo Dohnaseek y Milttelt se negaron, ellos no querían volver a encontrarse con ese mago humano y a su aterrador poder de luz.

La misión retomaría su rumbo de no ser por un detalle, Kokabiel. El líder aprovecho la oportunidad para hacerle ver a Raynare y su amiga que este individuo era una amenaza so solo para su raza sino para las 3 facciones. Ella lo experimentó en carne propia y portando una gran tristeza tomó la decisión de seguir el consejo del gobernador caído. Ella necesitaba poder y sabia como conseguirlo, los Sacred Gears. 

Aprovechando al nuevo elemento entre sus filas, ella ideó un plan para removerle su Sacred Gear y hacerse con el poder. Cuando finalmente lo consiguió su corazón se llenó de alegría. Por fin se volvería alguien capaz de defender a su raza... Su padrastro estaría feliz al verla con su nuevo poder... Pero ese pensamiento fue interrumpido por el sonido de unos aplausos nada gratificantes.

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