Era un día normal y tranquilo, los chicos del barrio habían culminado otra misión que se les había encomendado, por desgracia para número 4 su amiga y compañera número 3 había sido blanco de ataques, fue entonces que cuatro la salvó de todo por así decirlo. Pero no era algo que fuera molesto para cuatro, no, era para él un placer salvar a su mejor amiga, o eso era lo que a todos hacía creer. Pues, en él había algo más que solo una amistad, la veía con otros ojos en estos últimos días: estaba confundido ante lo que pasaba en su vida. «¿Qué demonios me está pasando?», pensó. No entendía lo que le estaba pasando estos días solo sabía que número 3 era más amable con él de lo habitual. No era algo que él pudiera ver todos los días, le extrañaba saber que su amiga lo abrazaba más de lo habitual, hasta se podría decir que hasta olía el olor de su cabello rubio. Era algo que a él le hizo sonrojar como tomate cuando lo abrazó la última vez.
—Esto es algo que ella nunca había hecho antes—. ¿Cómo es posible que ella haga tal acción? —se dijo así mismo al analizar la situación, sin embargo, comenzó a recordar la primera vez que la vio—. No puede ser, yo y Kuki nos conocemos desde la guardería, y aún lo recuerdo como si hubiera sido ayer...
8 años atrás....
Era un día como cualquier otro para Wallabee, no obstante, algunos de los niños que iban a la guardería le habían dicho que tendrían un nuevo integrante en la guardería, Wallabee no le dio mucha importancia a lo que estaba pasando en la guardería.
—Oye Wally, ¿Crees que sea una niña? —preguntó uno de sus compañeros de juego.
—Y de ser así ¿Creen que sea una linda niña? —preguntó otro.
—¡¿Qué?! ¿acaso perdieron la cabeza? —Exclamó Wally al escuchar las preguntas de sus compañeros.
A Wally no le importaba el tema el cual no entendía de los demás, quería saber por qué les llamaba la atención la nueva integrante de juegos. Wally solo se retiró a jugar con los cochecitos él solo, no quería saber de la conversación de los otros niños que estaban en la guardería, para mala fortuna del pequeño Güero Torres, el rumor era demasiado grande que pareciera que a toda costa querían que estuviera por enterado.
—Lo que me faltaba, no tengo ni un momento de paz gracias a quién sea el nuevo o nueva —dijo Wally al estar en el patio de la guardería.
Pasaron los días y el Güero siguió sin soportar el mismo tema, sabía que sus amigos lo estaban molestando con eso en la guardería; ese sería el tema de esos días. Aunque claro, no sabía que estaría con su nuevo compañero de juegos. Sin embargo, en el trabajo de su padre había alguien nuevo según sus palabras, era del extranjero, y que tal vez si le caía bien lo o la invitaría a comer a su casa, y así podría conocer a su familia la cual venía con el nuevo.
—Oh cielos, entonces eso quiere decir que vamos a tener nuevos amigos del extranjero ¿cierto?
—Claro querida
Wallabee no tenía mucho interés en ese tema, solo seguía comiendo. Cuando llegó el día siguiente, Wally ya estaba a punto de comenzar la hora de la siesta, cosa que Wally amaba hacer en la guardería, no obstante, alguien le llamó la atención al pequeño Güero Torres. era una niña que estaba dormida en el lado derecho de su lugar donde tomaba su siesta, cosa que se le hizo extraño ya que nadie dormía ahí, «¿quién es ella?», pensó. Pues la que estaba durmiendo a su lado era extrañamente hermosa para él, no sabía de dónde o porqué estaba ahí, solo sabía que era muy hermosa ante sus ojos, cosa que no era normal en él.
Entonces alguien le llamó la atención. Ese alguien era la ayudante de la guardería.
—Wallabee, no vayas a despertar a Kuki. Ya es hora de que tú también vayas a dormir.
El pequeño estaba confundido por lo que estaba pasando, ya que esto no era algo que él pudiera analizar con facilidad, «¿Kuki? ¿Ese es un nombre? Bueno, es muy... ¿bonita?». No podía dejar de pensar en ella como si fuera algo que él destino había planeado desde el principio, un amor que nadie podía creer era como si su corazón le dijera que ella fuera muy especial en su vida. Pero poco a poco se fue quedando dormido con solo verla y terminó pensando en ella.
Al despertar vio que ella estaba sentada a su lado, cosa que le pareció extraña, pero no iba a preguntar cómo cobarde salió corriendo de ahí, sin saber qué era lo que quería su compañera que era de raíces asiáticas. Al detenerse vio a sus otros compañeros de juego, los cuales estaban riendo a sus espaldas. Esto hizo que Wally se sintiera mal al escucharlos hablar.
—Debieron verlo, estaba durmiendo al lado de la nueva.
—De que lo vi, lo vi, el Güero estaba dormido feliz a su lado.
—Ja, ja, ja, eso no es algo que esperaba de él, entonces quiere decir que a Güero le gusta Kuki ¿eh? bueno, si lo vemos cerca de ella haremos todos lo posible verlo avergonzado. —entre los 3 se reían de Wally sin saber que él antes mencionado estaba oyendo todo lo que le decían, ha Wally esto lo hizo darse cuenta de que lo que sentía no podía ser expresado, era algo que sin duda alguna debían terminar ignorando en su vida—, «Bien, gracias, amigos, son tan buenos para dejarme en ridículo». Pensó el pequeño Güero Torres, no iba a ser cruel con la nueva, sólo les iba a dejar en claro a sus "amigos" que él no sentía nada por la japonesa, que podrían llegar a ser amigos y no más.
—Ya lo verán niños tontos, entre esa mocosa y yo no hay nada —dijo Wally sin mirar hacia donde iba.
—¡Ay! —Exclamó alguien de dolor.
Wallabee se da cuenta de lo que había pasado, delante de él estaba Kuki, al mirarla en el suelo la levantó con mucho cuidado. asegurándose de que no se haya hecho daño alguno. al ver que no se había hecho daño, comenzó una conversación.
—Hola... Kuki, ¿cierto? —dijo Wally un poco nervioso sin entender el porqué estaba tan nervioso de verla.
—Si güero, perdón por el apodo, es que no sé cómo te llamas.
—Je, je, je, no te preocupes puedes llamarme así si quieres —dijo Wally todo nervioso y sonrojado—. Es más, podemos ser amigos. Digo, si tu quieres.
—¡Claro que si Güero!
Actualmente...
—Desde entonces y hasta la fecha, hemos sido amigos y ahora sé que lo que siento por ella siempre fue enamoramiento que con el paso del tiempo se convirtió en amor y cariño —mencionó Wally feliz por razón de su alegría.
—«Cómoolvidar la vez que fui a cenar a su casa» —Pensó la chica de suéter verde.
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Un Güero Enamorado
أدب الهواةWally alias número 3 ama con toda su alma a Kuki su amiga y amor de infancia, sin embargo, le cuesta expresar sus sentimientos por ella, ella ya sabe de los sentimientos el güero hacia ella. Wally hara todo en sus manos para así declarar su amor y...