Synchronicity

Cap.3 - La esperanza

¿Exactamente a qué se refería? ¿Entonces yo tenía razón y no era él quien estaba tendido en ese cuarto frío? ¿Y por qué eso habría de ser mucho peor?

Estaba a punto de saberlo.

P'Eed me llevó a una sala alejada de los demás para hablar conmigo.

Pidió un par de bebidas calientes para ambos. Si ya de por si la situación era difícil de digerir lo que se venía iba a ser aún peor.

"Bright sigue con vida..." - comenzó a decir - "…sin embargo es mucho peor a si hubiera muerto. Verás, en el mundo hay muchas cosas muy turbias y la mayoría de estas cosas son ocasionadas por gente muy poderosa. Hay juegos de entretenimiento que practica esa gente. Entre ellos está el de secuestrar celebridades haciéndolas pasar por muertos ya sea suicidios, accidentes, asesinatos...tienen el dinero suficiente para crear cuerpos falsos y engañar a las familias y amigos cercanos para que ellos mismos crean que murieron. Lo que hacen con esas celebridades que secuestran puede variar mucho. Bright pudiera estar perfectamente bien o estar viviendo el peor de los infiernos".

Nuevamente se me heló el cuerpo. ¿Quién les daba el derecho a estas personas de arrebatárnoslo?

"Phi, tenemos que hacer algo, no podemos dejarlo así" - le dije. Mis palabras sonaban como una súplica, en realidad estaba muy asustado por ti y por lo que pudieras estar pasando, a la vez me sentía muy preocupado de no saber por dónde empezar para poder ir a rescatarte.

"Haré lo que pueda para localizarlo lo más rápido posible, pero quizás esta sea una batalla que tengamos que enfrentar solos". - Me dijo.

Phi se relacionaba con gente de todo tipo, era así como había conseguido que las carreras de ambos llegaran tan alto. No me extrañaba que supiera todo lo que me había dicho. Definitivamente sabría qué hacer, tenía toda mi confianza y mis esperanzas puestas en ella.

Pasaron un par de meses que se me hicieron eternos. No dormí ninguna de las noches. Agradecía el hecho de que tu madre y tu familia pensaran que ya no estabas en este mundo, pues aún con su dolor al menos tenían paz y no estaban viviendo este infierno de tener que esperar a recibir noticias tuyas.

Finalmente Phi me llamó.

Volvimos a ir a un lugar tranquilo y aislado para hablar.

"Él está dentro de lo que cabe 'bien'. Al parecer le gustó a la hija de una de estas personas. Después se enteraron de que sabe Muay Thai así que lo tomaron como una especie de "perro de pelea" para sus apuestas y su entretenimiento. Hay otra cuestión, esta gente tiene más que suficiente dinero para invertir en tecnología que solo se ve en nuestros sueños, a lo que voy es que, en algunas ocasiones para que no se revelen o se nieguen a hacer lo que se les pide, les borran la memoria a aquellos que secuestran. Han hecho esto con Bright."

Todo esto era sumamente difícil de digerir, me costaba creer que estas cosas fueran reales y que nos hubiera tocado a nosotros estarlas viviendo.

"Seré completamente honesta contigo, no hay modo de recuperarlo." - Me dijo

Me sentí desolado, no podía permitir que todo terminara así, corrías peligro a cada instante. Si te tenían como perro de pelea estabas siendo gravemente lastimado en cada una de éstas peleas. No quería ni imaginar lo que pudiera llegar a sucederte.

"Phi, debe haber algo que podamos hacer" - dije decidido, mi voz ya no sonaba como una suplica, sino más bien como una orden.

Vaciló un poco.

"Solo se me ocurre una manera. Tendríamos que infiltrarnos. Pero eso significaría que tendrías que hacer pasar a tu familia lo mismo por lo que pasó la familia de Bright. Conozco a alguien que puede ayudarnos, pero tendrás que convertirte en su perro de pelea". -

Me estaba colocando entre la espada y la pared. Estoy seguro que esto no era fácil tampoco para ella. La decisión era completamente mía.

Una noche más sin dormir, en esta ocasión subí a una de las azoteas de la casa, ahí me quedé sentado hasta ver el amanecer.

Llamé a P'Eed.

"Hagámoslo" - Le dije finalmente.