Vida Y Sangre

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Jungkook no sabía por qué de pronto era más consciente del latir de su corazón. Jihoon no le ofreció sentarse y en cambio le dedicó una mirada apática, ante ésta, él inspiró hondo y habló:

—¿Estás diciendo que el consejo ha decidido darle la espalda a Yugyeom? No pueden hacerlo. ¿Por qué ahora? ¿Por qué a él que tanto ha trabajado?

El mayor asintió tosiendo y apoyó sus codos en el escritorio—Por miserables. Avalaron mi desición de nombrarlo mi sucesor mientras él era realmente joven para tomar ese cargo. Hace un par de años, cuando Yugyeom tuvo aptitud y despuntó como el mejor con el apellido, comenzaron a exigir más.

La mirada confundida de Jungkook que nunca tomó asiento buscó la de su padre, pero éste evadía mirarlo.

—Ante sus ojos, Yugyeom no es digno.

—Es un absurdo. Que no esté en la línea de sucesión no le quita nada.

Jihoon sonrió y se echó para atrás en su silla—Hasta tú lo entiendes. Pero en realidad, tienen un punto, uno fuerte.

—No logro verlo.

—Yugyeom es solo un medio Jeon.

—¿Cómo?

• • •

Después de darse una ducha, Yugyeom bajó las escaleras ajustándose los puños de su camisa. Yuna apareció corriendo y, con la boca llena, un pastelillo en una mano y su celular sonando en la otra, pretendió seguir su carrera.

—¡Y un carajo! ¡Yugyeom!—soltó luego de reparar en él.

El joven se detuvo haciendo un esfuerzo por lo corregirle el vocabulario. Volteó a verla.

—Jungkook llegó. Está con papá en el despacho, casi olvidó decírtelo—terminó por pasar su bocado y luego su atención fue a su móvil—¡Ah, perdí la llamada!—se lamentó y volvió a subir, pero con menos prisa.

Yugyeom la vio partir y dudó sobre presentarse ante ellos o volver a los asuntos jurídicos en la constructora. Cuando estuvo en la primera planta dio un par de pasos directo a la salida, pero finalmente se detuvo y giró al cambiar de opinión.

Sus pasos fueron firmes hasta llegar al despacho. Sus dedos doblados se detuvieron justo antes de golpearse contra la puerta para hacerse notar.

—Yugyeom es sólo medio Jeon.

—¿Cómo?

Él bajó su mano y se recargó en el muro a su lado.

—Lo que imaginas.

Yugyeom apretó el puente de su nariz y cerró los ojos agotado mentalmente. El mayordomo se acercaba con un par de tazas y una jarra, pero él, con una seña de su mano, le pidió que no se acercara más. El hombre que por años había servido a la familia asintió profundamente con el rostro serio y de alejó.

Los sonidos de las voces en el interior del despacho perdieron fuerza.

• • •

Jungkook había escuchado muchas veces hablar de Jeon de linaje puro, de líneas de sucesión privilegiadas y, en menos ocasiones, de medios Jeon.

—Eso quiere decir que la madre de Yugyeom no era alguien de la familia. Mi tía Hyori...

—A mi hermana nunca le interesó la sucesión. En eso Yugyeom se parece a ella. Todo este tiempo me he preguntado si esa actitud era genuina o simplemente era por orgullo herido. Creer que es lo segundo me ha dolido siempre.

—Es por eso que quieres que Yugyeom sea quien te suceda—mencionó Jungkook, él lograba entender eso, aunque aún no lograba conmoverse suficiente como para justificar que su padre siempre lo hiciera sentir incompetente y rechazado.

Consecuencias «YK» Donde viven las historias. Descúbrelo ahora