15. 𝗣𝗥𝗜𝗠𝗘𝗥 𝗔𝗖𝗘𝗥𝗖𝗔𝗠𝗜𝗘𝗡𝗧𝗢

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Gritos , desesperación y antorchas por todos lados, era lo único que había en cada rincón de este pueblo.

- Takashi , por favor sueltalo - la pelinegra forcejeo el brazo del pelinegro quien seguía pateando el cuerpo herido del pelirosa.

- Callate maldita puta - empujó a la mujer  fuertemente cayendo al piso - Todo esto es por tu culpa , por ser una puta mira todo lo que has causado - le grito frente a todo el pueblo quién apoyaba al pelinegro.

- Dejala , el problema...soy yo - hablo con dificultad el pelirosa intentado pararse.

- Tu cállate - el pelinegro lo pateó fuertemente botandolo a un lado - Te dije - grito golpeándolo brutalmente - Te dije que no te metieras con mi mujer , te lo advertí - otra patada - Ahora sufre las consecuencias de tus pecados - otra patada en sus costillas.

- Por favor Takashi sueltalo , déjalo que se vaya , déjalo en paz - suplico la pelinegra arrodillada viendo al pelinegro.

- Nada - grito agarrando el cuello de la mujer fuertemente - Nada cambiará lo que hiciste - le apretó fuertemente haciendo jadear a la mujer de dolor para después soltarla con fuerza.

- Haré...- pause intentado recuperar el aire - Haré todo lo que quieras, solo sueltalo - le pidió - Hazlo por nuestro bebé por favor - le rogó la mujer en el piso mientras su bebé era cargado por unas de las mujeres del pueblo que la veía con asco.

- Amaya no...- susurró con dificultad el pelirosa mirándola con dolor.

- Demasiado tarde Amaya - el pelinegro miró con frialdad a la mujer - Te advertí que no jugaras conmigo - desenvainó su espada el pelinegro - Pero jugaste con fuego y es hora de que pagues por ello - se acercó al pelirosa quien era agarrado por unos hombres de la cabeza.

- AKEMI - grito la pelinegra con horror.

Silencio.

La pelinegra se puso las manos en su boca para gritar fuertemente mirando horrorizada la cabeza de su amante tirada en el piso, su cara y sus manos manchadas de la sangre su amado con la mirada perdida escuchando puros ecos.

- Ahora tu mi preciosa Amaya - se acercó el pelinegro arrodillándose frente a la mujer agarrandola del mentón - Te irás al mismo infierno con el - gritó.

Todo pasó tan rápido que solo sintió el filo de la espada en su cuello volviéndose después todo negro.

Todo pasó tan rápido que solo sintió el filo de la espada en su cuello volviéndose después todo negro

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𝐴𝑚𝑜𝑟 𝑑𝑒 𝑀𝑎𝑙𝑑𝑖𝑐𝑖𝑜𝑛𝑒𝑠  ||𝚂𝚞𝚔𝚞𝚗𝚊||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora