1 de enero de 2023
Gigi's POV
Aunque llevaba casí dos meses evitando a Carlos no pude evitar pasar el fin de año con él. Tanto sus padres como lo mios habían decidido irse a Tailandia a pasar el año nuevo, así que Carlos y Ana decidieron montar su propia fiesta en casa.
Aunque muchos pensaréis que estaba media parrilla de Formula 1 no fue así. Querían hacer algo íntimo así que invitaron solo a los amigos de toda la vida de Madrid, pero bueno mínimo eramos 70.
Para la ocasión me puse en vestido negro bastante corto y con la espalda muy abierta, acompañado de unos tacones nuevos con lacitos de Jimmy Choo, lo reconozco, tengo un problema con los zapatos.
Mientras bailava al ritmo de Bad Bunny con mis amigas, noté como de repente de iban dedicandome una sonrisa mientras noto unas manos en mi cintura. Giro un poco la cabeza y veo que es Carlos... No sé si fue porque los dos ibamos borrachos pero bailamos durante horas, lo más cerca posible.
A las seis de la mañana ya no quedaba nadie, solo Ana que ya se había ido a dormir y Carlos y yo en el salón.
-Gigi: Bueno... ya no queda nadie, mejor me voy para casa -dije mientras me balanceaba un poco-
-Carlos: Gigi, aun vas medio borracha, quedate a dormir, te dejo una camiseta y duermes en mi habitación, así no molestamos a Ana y yo ya duermo en el sofa -me dijo mientras me guiaba hacia su habitación
Carlos me dejó una camiseta bastante larga encima de la cama y se fue. Me quite los tacones, el vestido y el sujetador, para ponerme la camiseta de Carlos, me lavé la cara y me dispuse a ir a dormir.
Pero hubo un problema, todo olia a él, pero él no estaba allí, así que me fui a buscarlo mientras todo me daba vueltas.
-Carlos: ¿Que haces aquí? Deberías estar en la cama descansando... -me dijo medio dormido-
-Gigi: No puedo dormir... ¿puedes venir? -mientras le hacia pucheros-
Carlos no lo dudó, se levantó, me cogió en brazos y fuimos hasta su habitación. Con él me sentia segura como nunca lo había sentido antes.
Una vez llegamos a la habitación me dejó en la cama, se puso el pijama y enseguida vino conmigo y me abrazo.
En mi vida había llegado a dormir tan bien.
