Las 20 cartas que te escribí pero nunca te envié.

El balcón.

Tan fácil es recordar aquel día, donde para mi fue de los peores, mi ansiedad rodeaba todo mi ambiente, el despertar cada día era tan complicado que a veces pedía no hacerlo, lo único que pedía era por fin estar tranquilo, sin llorar ni estar triste solo estar existiendo.

Llegaba a la escuela y era algo tan raro que estando rodeado de personas me sentía tan solo, me apartaba de todos intentando no pensar en mis problemas, lloraba a escondidas de todos para evitar incomodar o preocupar.

Pero en toda esta mierda hubo alguien que me salvo, era el único que estuvo para mi en mis peores momentos.

Tuki…así fue como lo llamé el fue mi mejor amigo, aquel que me alentaba a estar bien cada que me sentía como una mierda.
Gracias a el pude desahogarme, pude pararme y seguir en pie una vez más, rogaba a la vida que no te fueras o que simplemente no te alejaras.

Una tarde regresando de clases yo me sentía tan destrozado, que ni sabía que hacer todo el mundo se venia abajo y se rompía después de aguantar tanto daño.

No pensaba que seria tan grave hasta que tome aquella navaja entre mis dedos y pensaba lo que para mi era perfecto.
Ponía el filo de la navaja en mi brazo para poder hacer los primeros cortes. Antes de que eso sucediera una llamada entró en mi teléfono.

Tu nombre se hacia inevitable no conocer, me hablabas desde el techo de tu casa y desde ahí esperabas un regaño de tu madre. Hablabas hasta calmarme, llore, grite y te confesé hasta mis más oscuros secretos, tu escuchas preocupado y solías solo darme aliento, tu voz fue mi gran salvación.
Era ya tan de noche y yo me encontraba en el gran balcón de mi departamento, lloraba frente a la luz de la luna, frente a la gran avenida que tenía de vista.

No resistí más e hice los cortes en mi piel olvidando todas las promesas que te hice, te alejaste de mi después de eso, creo fue lo que más me dolió en todo este año. Perdí a mi mejor amigo.

Gracias por salvar al último pedazo de vida y esperanza que me quedaba. Hasta donde estés tuki…muchas gracias.

Te extraño demasiado y te quiero mucho.

Nota:
Hoy fue momento de recordar a aquel viejo amigo que me ayudo en todo...espero lea esto.
A todos los demás los quiero

La ranita se despide.🐸🖤