𝑺𝒘𝒆𝒆𝒕 𝑵𝒊𝒈𝒉𝒕 ♡︎[KM]

🌷Capítulo Nueve🌷

Primer mes

El sol se hallaba en su máximo esplendor.
El cielo azul acompañado de sus blancas nubes de algodón era una vista digna y preciosa de admirar.
El día tenía un clima sumamente agradable como para que las personas realizaran sus actividades rutinarias sin problema alguno.

Por la acera, dos jóvenes caminaban agarrados de la mano, siendo el blanco perfecto de miradas juzgadoras, sin embargo, a ellos no parecía importarles.

Ambos vestían con prendas ligeras y frescas. Reían mientras charlaban.
El más bajo tenía en su mano derecha un cono de helado de fresa. Lucían tan felices.

-Y así fue como pasó todo, y créeme, aprendí la lección.- Habló el alto castaño, quien sonrió al oír la melodiosa y dulce risa de su novio. Podía observar como sus preciosos y pomposos labios se transformaban en una sonrisa, que ante sus ojos, era la sonrisa más bella que nunca antes había visto, y los ojitos contrarios, se cerraban hasta formar medias lunas.

Sin duda ese chico le hacía derretir su corazón.

El pelinegro le dio una lamida a su delicioso helado, sin percatarse de haberse manchado en la mejilla, sin embargo, el más alto lo notó, y frenando su paso, con su mano libre retiró el la manchita de la suave mejilla de su novio, para luego lamer su pulgar y sentir el dulce sabor en su paladar. El más bajo le sonrió, y nuevamente continuaron su recorrido.

Llegaron hasta el parque, el cual era su destino, y tomaron asiento en una de las bancas.

El más bajito, recostó su cabeza en el hombro del menor, mientras aún comía su helado, y el contrario, se dedicaba a mimarlo, jugando con sus sedosas hebras negras.
-Te amo mucho.- Expresó de la nada el de cabellos negros, tomando por sorpresa al castaño, quien sonrió en grande por sus palabras y luego habló.

-Yo también te amo, mi corazón. Mucho.- Le depositó un tierno beso en su suave cabellera. -Me haces muy, muy feliz.-

-Tu también me haces muy feliz.- Dijo y continuó comiendo.

-Lo digo enserio mi pequeña estrella. Eres la luz de mi vida.- Jimin rió. -¿De qué te ríes?- Cuestionó Jungkook con una ceja levantada. -Si es la verdad.- Tomó entre sus manos las suaves y algo regordetas mejillas contrarias, y empezó a repartir tiernos y dulces besos en estas, intercalando y haciendo reír más a novio. -Te amo, Te amo.-

Jimin depositó un tierno beso en la nariz de Jungkook.

Por un momento, los jóvenes enamorados dejaron de un lado sus problemas y tristezas, y ahora se encontraban melosos, dándose cariñitos en ese parque olvidando todo a su alrededor y dejando pasar desapercibidos las miradas de la sociedad.

Frente a ellos, un grupito de señoras cuarentonas pasaban, mirándolos con desprecio y murmurando entre ellas, hasta que una habló de manera audible, captando la atención de los jóvenes enamorados. -Es una barbaridad que permitan este tipo de actos. - Escupió.

-Mínimo deberían irse a otro lado. Ya no hay respeto con esta gente. Se me hace algo muy horrible que los niños que lleguen al parque y lo primero que vean sea a dos hombres besándose.- La señora de menor estatura entre todas habló sin dejar de lanzar constantes miradas a la pareja.