La Tutora | NI-KI | [EDITANDO]

009

NI-KI

Riki no había asistido a clases ese día, aún estaba sensible luego de su conversación con su hermana en la mañana, pero en su corazón había un poco de esperanza.

si era posible que su tutora sintiera algo incluso algo pequeño por él, era suficiente, significaba que ese algo pequeño no la dejaba dormir como a él y ese algo pequeño, se convertiría en algo capaz de no olvidar como le sucedía al menor en estos momentos.

─la llamaré ─dijo para él, armandose de valor y marcando el número de la chica.

Llevo el celular a su oído, y espero a que sonara.

─¿hola...? ─su corazón se emociono al escuchar a la dueña de esa voz.

─Noona... ─en cuanto habla la llamada se cuelga─. espera.

Lanzó el celular frustrado.

─Lo sabía, me odia, jamás sentira nada por mi.

KAIRI

Noona

la chica suspira al no poder sacar esas palabras de su mente. Habían pasado dos semanas desde lo sucedido, había fingido estar enferma así no tenía que ir a casa de Ni-Ki, pero no podía fingir por mucho tiempo.

─¿qué me esta pasando?, ¿por qué no dejó de pensar en ese beso? Me estoy volviendo loca ─lloriquea.

De hecho Ni-Ki tenía razón, la mayor, no había podido dormir pensando en ese algo pequeño que el menor era capaz de causar en ella.

Me gustas

Miro en su reloj y casi era hora de ir a casa del más pequeño, así que se levantó de su cama, tomó sus cosas y salió de casa.

Lo mejor era fingir que nada había pasado, así estaría menos incomoda.

Al llegar a casa del pelinegro este la esperaba con una gran sonrisa.

─Kairi, pensé que no vendrías ─dice éste feliz.

─¿por qué no iba a venir? Vamos, se nos hará tarde ─dice y entran a la casa.

Estando en la habitación, él le dio su espacio y se sentó tres centímetros alejado de ella, pero aún seguía a su lado.

─¿qué hiciste en la escuela hoy? ─pregunta ella.

─uh... No lo sé ─dice él sin mirarla.

─¿no lo sabes? Pero ¿acaso no prestas atención?

─no fui hoy, no me sentía muy bien.

─¿ya te sientes mejor?

─sí ─la mira, y ésta se asusta─. Es porque me alegro mucho de verte, Noona.

─continúa ─le dice para que haga las prácticas y él asiente volviendo a lo suyo.

─¿seguirás fingiendo? ─pregunta de repente.

─¿qué? ─pregunta ella.

─que si seguirás fingiendo que nada pasó ─vuelve a mirarla.

─¿Mm?

─Noona... ─baja la mirada a los labios del menor e imagina que estos la besan otra vez.

─¡no! ─se levanta.

─¿qué?, Juro que no hice nada esta vez.

─no, lo siento ─niega ella y vuelve a sentarse junto a él.

─¿estas incomoda porque también te gusto?

─no lo sé.

─¿dices que no sabes como te sientes?

─me confundes ─el más alto sonríe.

─¿puedo hacer algo para que dejes de estar confundida?

─no vallas a besarme ─lo mira mal y éste ríe.

─no voy a besarte, sólo dime.

─no es que no lo supiera desde hace un tiempo, es sólo que no pensé que sería así, me escribías siempre que querías y no hice nada para detenerte, de repente empecé a esperar que lo hiciera y me acostumbre, luego te sentabas a mi lado y me hacías sentir más cómoda, tu cambio de humor dejó de molestarte y se me hizo adorable, no sé si me gustas o si sólo quiero seguirte la corriente porque mi vida es aburrida; no tengo idea de lo que siento por ti.

─¿tienes miedo de mi? ─pregunta tomando el cabello de la chica y acomodandolo detrás de su oreja para verla mejor.

─no tengo miedo de ti ─lo mira─. Tengo miedo de lo que puedo sentir por ti.

─¿por qué?

─porque tú madre me agrada mucho.

─¿sólo por eso?

─¿qué pensara de mi? ─el menor niega y empieza a reír.

─se alegrará ¿no pensaste en eso?

─soy mayor que tu, sería raro.

─a mi no me importa tu edad, en cambio tu, sólo me ves como un niño, pero sólo eres mayor por dos años, ¿o es que te avergonzaria tener un novio que va a la escuela?

─no me avergonzaria.

─seguro que no ¿verdad? Porque soy muy atractivo ─ahora ella se ríe.

─seguro.

─¿entonces también te gusto?

─dame tiempo ¿si? ─él asiente.

─pero por favor no te tardes, quiero contarle a mi madre que eres la chica que me gusta.

─no me presiones, aun descubro lo que siento por ti.

─¿puedo besarte?

─no.

─¿puedo tomarte de la mano?

─no.

─¿puedo invitarte a salir?

─no.

─¿entonces cómo vas a darte cuenta de lo que realmente sientes?

─ya te lo dije, dame tiempo.

─que aburrida eres.

─y tu eres demasiado impaciente ¿acaso te he dicho que no?

─¿ah? Es justo lo que dijiste, te pregunté, ¿Puedo besarte? Y dijiste no tres veces a cada pregunta que hice.

─no a eso tonto, pero no he dicho no a la posibilidad de hacerlo pronto.

─no sé para que esperar tanto, ya me hice viejo ¿lo ves? Envejeci, esperarte es como esperar una eternidad, ya me estoy cansando de espe... ─lo toma de la mejilla y lo besa.

─deja de hablar ─sonríe empujandolo un poco.

─creo que quiero hablar más seguido ¿que harás al respecto?, ¿Puedo tener un beso cada vez que hable?

─Ni-Ki, por favor.

─sólo quiero un beso más.

─no más.

─aish.