Despertando a Charlie

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Anne había ido de visita a la casa de su hijo.

Con regularidad, Anne visitaba a Harry y a Louis para saber cómo les estaba yendo en su nueva etapa como padres.

Louis y Harry estaban casados, se unieron en matrimonio hacía ya tres años atrás y querían el siguiente paso en sus vidas, el cual era;tener una familia.

El día que le dijeron a Anne que deseaban adoptar un bebé ella chilló de la emoción, no había otra cosa que quería más que ser abuela.

Y ahora lo era.

A veces cuando Anne llegaba, Louis salía a pasear con sus amigas y dejaba a Charlie en casa, hoy era uno de esos días.

—Por favor, no pongan a Charlie en el viento, hoy hace mucho y ha estado resfriado—Fue lo último que Louis dijo antes de salir de casa.

—¿Cómo han estado?—Preguntó la madre de Harry cuando Louis se fue.

—Louis no sale de la casa si Charlie no va con él, no sé qué más puedo hacer para separarlo de su bebé.

—¿Le has buscado un trabajo en tu empresa?

—Lo he hecho, pero dice que Charlie necesita de toda su atención ¡Ya tiene un año, no necesita toda su atención, madre! —Golpeó la barra de la cocina y fue por una pastilla y un vaso lleno de agua. —¿Puedes ir a cambiarle la ropa, por favor? Louis se molestara si lo encuentra con la misma ropa que con la que lo dejó.

Anne fue al cuarto de su hijo, se acercó a la cuna y tomó a Charlie entre sus delicadas manos.

Lo dejó sentado en la cama y buscó la ropa del bebé que estaba en el closet, se sorprendió al ver que alguien de tan solo una año tuviera incluso más ropa que ella.

Le cambió de ropa y le puso otros zapatos, estuvo un par de minutos acomodando un gorro de tela sobre su cabeza porque se solía caer.

Una vez terminó, fue hasta el balcón con Charlie en brazos y se quedaron frente a los árboles que se movían con delicadeza por el viento.

Harry se había quedado dormido, Anne había dejado a Charlie en la cuna antes de salir de la casa sin despertar a su hijo.

Cuando Louis volvió, enloqueció.

—¡Harry! —Gritó con fuerza desde la habitación. Harry despertó asustado por el grito y fue corriendo hasta la habitación que estaba en la planta de arriba—¡Charlie está muy mal! Tiene temperatura, les dije que cuidaran que no estuviera en el viento.

Harry se molestó, Louis apenas se había ido un par de horas y había llegado a gritar, estaba seguro de que Charlie no tenía nada y Louis no paraba de culparlo.

—Tienes que llevarme al hospital para que lo revisen.

—No—Dijo frotando sus ojos—Charlie está bien y me despertaste por tus gritos, no los llevaré a ningún lado.

Louis tomó las llaves del auto y salió para llevar a Charlie al hospital.

Harry cumplió su palabra y los dejó marchar solos.

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Ya me eché varias teorías, están muy buenas.